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—No lo veo

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—No lo veo... no lo veo.— repitió Lia con desesperación, tratando de ver entre la multitud. La ansiedad la estaba consumiendo cuando de repente un grito cortó el aire.

La pelirroja bajó rápidamente por las gradas, corriendo hacia donde se comenzaba a juntar un tumulto de personas.

—Permiso, permiso. Lo siento, permiso por favor.— decía la pelirroja mientras empujaba a las personas a un lado para que la dejaran pasar.

Lia empujó a la gente a un lado, su corazón martillando en su pecho con cada paso. Finalmente llegó al centro del tumulto, y su mundo se detuvo al ver a Cedric tendido en el suelo, inmóvil.

—¡Cedric!— gritó Lia, arrodillándose a su lado. —¿Ced? Mi amor, estoy aquí, por favor respóndeme.— Su voz se quebró mientras sacudía su cuerpo, tratando de despertarlo. —¡Cedric, por favor, despierta!

Cedric no respondía, y la desesperación de Lia creció. Las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas mientras sostenía su mano. —Por favor, Cedric... por favor, no me hagas esto, despierta,
por favor.

La multitud murmuraba alrededor, llenos de preocupación. Anya llegó junto a ella, con una expresión de horror y preocupación.

—¡Necesitamos ayuda!— gritó Anya, tratando de atraer la atención de los profesores. —¡Rápido!

—Harry, ¿Que pasó?— preguntó Lia  al chico que veía a Cedric con preocupación. —¡Harry, joder! ¡Respóndeme!

—Está de vuelta...— susurró él.

El profesor Dumbledore apareció entre la multitud, abriéndose paso rápidamente hacia Cedric. —¿Que pasó?— Preguntó viéndolo para luego mirar a Harry. —¿Harry, qué pasó?

—Ced... por favor... despierta...— continuó Lia llamándolo, mientras acariciaba su mejilla.

Dumbledore se inclinó hacia Harry, buscando respuestas mientras la tensión en el aire se volvía casi palpable.

—Harry, dime qué ha pasado.— insistió Dumbledore, su voz grave y urgente.

Harry, con el rostro pálido y los ojos llenos de lágrimas, apenas pudo articular las palabras. —Voldemort... ha vuelto. Cedric... Cedric me pidió que...

La conmoción recorrió la multitud, y Dumbledore se volvió hacia Cedric con una expresión sombría. Madam Pomfrey se arrodilló junto a Cedric, realizando hechizos diagnósticos con rapidez y precisión.

Delicate (Cedric Diggory)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora