"A veces me pregunto cuando duermes: "¿alguna vez estarás soñando conmigo?" A veces cuando te miro a los ojos, pretendo que eres mío todo el maldito tiempo."
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—¿Ya casi estás Lía?— preguntó Anya.
—Dame un segundo.— dijo la pelirroja desde el baño, un segundo después abrió la puerta y salió. —¿Que tal se me ve esto?— preguntó un tanto nerviosa, Anya se dio la vuelta y quedó petrificada. —¿Mal?
—¿Y tú acaso vas a ir a hacer un show de strip a la fiesta o que?— preguntó con una sonrisa al ver a su amiga con un conjunto de lencería puesto.
—No seas tonta... quería... verme bien para Ced después de la fiesta...— tartamudeó jugando con sus dedos.
—¡Lia, ¡Estas revelada!, ¡por la barba de Merlin!
—Anya... basta, ¿se me ve bien o no?
—¿Bromeas? Te ves increíble, se le va a caer la mandíbula al idiota Diggory cuando te vea, está increíble.
—Okay... Gracias.
—No hay de que, ahora cámbiate rápido que de por si ya vamos tarde.
—Okay...
Cuando las amigas terminaron de arreglarse salieron de sus habitaciones para dirigirse a la sala común.
Una vez en la sala común, Lia y Anya se encontraron con un ambiente animado, bastante animado debía decir. La música resonaba en el lugar, mezclándose con las risas y las conversaciones de los estudiantes que disfrutaban de la celebración, las cantidades de luces que había, neones, parpadeantes, de colores, la cegaban un poco, pero todo estaba totalmente increíble.
—Vaya, parece que la fiesta está en su punto más alto, esto es una locura.— exclamó Anya emocionada, observando a los alumnos bailando y riendo.
Lia asintió con una sonrisa. —Está increíble, definitivamente Dante y Chris se lucieron.— admitió.
La pelirroja buscó con la mirada entre la multitud hasta que finalmente vio a Cedric conversando animadamente con algunos compañeros. Su corazón dio un vuelco al verlo, recordando por qué se había arreglado con tanto esmero esa noche.
Anya notó la expresión de Lia y le dio un pequeño empujón juguetón. —¡Ve a saludar a tu novio, chica!
—Anya... basta...— dijo con las mejillas rojas.
—¡Lia! No seas tonta, te ves totalmente preciosa, ese vestido realza todos tus atributos, anda y ve a qué Diggory admire la belleza que tiene como novia.
Lia sonrió avergonzada por el entusiasmo de Anya, pero también se sintió halagada por sus palabras. Decidió seguir el consejo de su amiga y se acercó a Cedric, quien al verla se iluminó con una sonrisa de lado. El castaño se acercó lentamente a la pelirroja con las manos en los bolsillos mientras la miraba de arriba hacia abajo.
—Hola...— dijo ella una vez él se acercó.
—Hola, hermosa mujer.— respondió él, se acercó aún más a ella colocando una mano en su cintura y la acercó dejando un suave beso en su mejilla. —te ves jodidamente preciosa.
