37.Oscuridad

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 La luz es la mano izquierda de la oscuridad, y la oscuridad es la mano derecha de la luz; las dos son una, vida y muerte, juntas como amantes. – Ursula Kroeber Le Guin

Entre las sombras de estas cuatro paredes, me mantengo en la incertidumbre se siente como un abismo en el que caes y crees que pronto vas a tocar el suelo sin embargo sigues cayendo como si estuvieras en un piso mil de pronto parece que vas a fusionarte con el viento mientras caes no sucede nada es una presión en pecho angustia de no saber cuando será la estocada final para morir el golpe definitivo que te llevara a la muerte, al menos de esa forma lo siento es como si esta oscuridad, esta realidad que me envuelve en el presente me llevara a mi final, tengo la sensación de que la cárcel será mi destino y muerte una parte de mi decide confiar no obstante la otra esta derrotada, pienso en mis hijos en lo mucho que van a extrañarme, en Nany, Remedios, Bernarda y Genoveva, Cris y los demás se que ellos confían en el hecho de que soy inocente y harán hasta lo imposible por sacarme de este lugar lúgubre, nunca imagine que la libertad fuera tan frágil como la vida misma aquí permanezco esperanzo un rayito de luz en medio de todo la oscuridad, llevo dando vueltas por la celda, esperando a que cuenca aparezca para hablar conmigo sobre que es lo que se puede hacer en mi caso, demostrar mi inocencia no será sencillo, al menos a la gente del pueblo sin embargo ellos me importan muy poco deseo salir limpia de todo esto esa es mi apuesta después de todo lo sucedido. al ver entrar a cuenca el alma me vuelve al puerto, el guardia abre la puerta para permitirle el acceso al pequeño lugar y estrechamos nuestras manos.

—María Teresa Santos me ha contado lo que paso, al menos su versión, necesito que me cuentes con lujo de detalle que fue realmente lo que sucedió, para poder llevar tu caso, siempre es importante escuchar distintas versiones antes de proceder en llevar un proceso penal como el tuyo.

—Esa noche yo estaba en la Esperanza, la fiesta de los niños había terminado, me encontraba afuera, escuche disparos, algo provoco que yo fuera directo a la Soledad y se que es algo absurdo solo tuve el impulso de salir corriendo algo me dijo que nada estaba bien y cuando llegue estaba la señora Helena en el suelo, bañada en sangre con signos de tortura yo se que lo que hice no estuvo bien, llegue a contaminar una escena del crimen, sin embargo yo quería a esa mujer, fuimos amigas un tiempo y ver esa escena tan horrible me rompió solo hice lo que hice llevada por el impulso de querer pedir ayuda, enseguida llego Ángel, Guillermo y Santos Ángel es el capataz de la Soledad, Guillermo esposo de la señora Helena, luego llego la policía y he dado la declaración de como fueron los hecho, te juro Cuenca que yo no cometí ningún crimen, además no había arma alguna en el lugar  —Tan honestas y sinceras son mis palabras que puedo ver en la mirada de mi abogado que me da un voto de confianza lo se he dicho lo que vi, las cosas que pasaron y nada mas que la honestidad para poder al menos tener el beneficio de la duda.

 —Entiendo, María Teresa tengo que recabar la mayor información posible de lo que paso aquella noche, con todos los involucrados, decir la verdad es muy importante para poder sacarte de aquí lo mas pronto posible, no hay arma que te incrimine como la autora de dicho crimen, si bien llegaste a la escena eso no demuestra que cometiste tal delito hare lo necesario para sacarte de este lugar —Las palabras de cuenca me tranquilizan un poco al hablar conmigo se despide de mi al menos tengo una esperanza de que todo se va a aclarar.

Otro día pasa en la que recibo la visita de los mios, Nany, Santos y Genoveva entran a verme yo puedo sentirme en familia con ellos visitándome entes lugar, la sonrisa de mi amor es tan bonita que no puedo con ella, Nany me ha dicho que a la señora Helena ya le han dado sepultura cosa que me da mucha pena puesto que yo deseaba estar y darle el ultimo adiós, sigo pensando en el hecho de que no merecía este final  Genoveva me lleva uno de sus desayunos que le salen riquísimos y agradezco el gesto de verdad, es como curita al alma.

Mi esperanza eres tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora