Mi esperanza eres tú

19.Obsesión

"Esa pasión descontrolada que se ha escapado de mis manos y ha alcanzado proporciones astronómicas, he dejado de pertenecerme, ella ha absorbido hasta el último de mis latidos".

Fragmento Narrado por Natasha

Desde el momento en el que lo vi y sentí sus manos sobre mi cuerpo, me perdí, al ver sus ojos supe que lo quería solo para mi y cuando supe que era casado una sensación de adrenalina quemo mi cuerpo e hizo erupción en lo mas profundo de mi cuerpo convirtiéndose en una obsesión que llevo muy dentro, arde como una llama que no se extingue, duele como una daga clavada en el corazón, lastima hiere y es como si cada dia perdiera un poco de conciencia me he vuelto loca, tal vez, no lo se pero definitivamente Santos Sandoval se me metió en la piel en la sangre apoderándose de todo mi sistema clavo un poco ,mas la navaja sobre mi carne para sentir que el dolor se va y así poder desconectar mi mente de la realidad y caer en su sueño sin final, no obstante un atisbo de cordura logra detenerme para frenar aquello que disipa mi fantasía, vuelvo a esta realidad que enerva mis sentidos. bebo de mi copa de vino tinto sintiendo como el liquido resbala por mi garganta, sueño con el, fantaseo con el y cuando observo mi copa casi vacía, la lujuria se hace presente dentro de mi, no se a donde me lleve esto solo se que nadie podrá arruinar mis planes, Santos sera para mi aunque tenga que acudir a medidas extremas e incluso a matar por el si es necesario, tiro la copa y esta choca contra el piso cada pequeño fragmento de cristal. es una parte de mi alma herida, la locura no tiene limites y la mía por Santos, no es temporal, no, no es ceguera es peligro es control y yo ahora mismo lo tengo entre mis manos.

Días después de aquella Serenata, Santos y yo estamos mejor que nunca, al menos en cuanto a nuestra relación, todo va viento en popa, sin embargo la presencia nuevamente de Natasha en el pueblo es algo que me preocupa en un cien por ciento, la realidad es que no ha hecho nada por entrar a la esperanza, al contrario se ha mantenido lejos de nosotros las ultimas semanas me resulta raro aunque el hecho de no tenerla cerca logra brindarme algo de tranquilidad Don Guillermo no sabe nada de Doña Helena, días después del regreso de su hija, vino a visitarnos a la hacienda para decirnos que las cosas con ella no van nada bien, no obstante le prometió que pronto su esposa hablaría con el ,Santos sugirió involucrar a la policía en todo esto y el comandante Robledo, apoyo la idea para ayudar a su presidente municipal, es un hombre serio de buenos principios y se nota que le tiene un cariño especial a su jefe, nada se compara con Rutilio y Trejo con las riendas en otras manos las cosas son mejores Puerto Bravo es otro desde que Don Guillermo se mantiene al frente y no tenemos queja de que su trabajo es excelente mientras estoy pensando en todo el misterio que envuelve la desaparición de doña Helena y permanezco ensimismada en mis pensamientos, Santos me toma por sorpresa regalándome una rosa roja.

—Por dios, Santos me asustaste —Me giro para tomar la rosa entre mis manos nos encontramos en los corrales a solas y aprovecha para robarme un beso tierno.

—Te vi de lejos y sabia que estabas pensando en algo, deseaba sorprenderte pero al final termine asustándote, Harvar yo no muerdo —Su mirada cambia a la de una lasciva muevo la cabeza asintiendo que si puede atreverse a morderme y lo hace clavándome los dientes en el cuello.

—Pues si, estaba sumida en mis pensamientos, es que la verdad todo el misterio que envuelve la ausencia de doña Helena en la soledad, me parece bastante extraño y el hecho que Natasha no haya asomado las narices por nuestras tierras es todavía mas extraño, como si quisiera mantenerse al margen de todo y de todos, al menos a su padre le ha dicho que su madre esta bien y que pronto lo llamara sin embargo, su proceder es de lo mas raro ¿No te parece?.