2.Luna y Miel

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"Después de esta hermosa velada de matrimonio, ahora estamos aquí tú y yo en la lejanía de nuestra sociedad y en el ruido de nuestro silencio, donde sólo podrán hablar la piel y dialogar el corazón cara a cara, pecho a pecho".

Entre besos, caricias y promesas con los tragos de mas damos vueltas por la suite reímos como dos tontos adolescentes enamorados, haciendo algo prohibido, logro ver de reojo que la habitación tiene de todo frutas champan, rosas y miel, sin embargo lo único que quiero comerme ahora es a mi Santos, lo deseo las piernas me flaquean por momentos al sentir su miembro tan cerca necesito romper esta tensión sexual ¡YA! es que lo que mi marido provoca en mi es difícil de explicar, se ha metido en la sangre y posee todo cuerpo, alma y corazón nuestras respiraciones agitadas solo incitan al preámbulo de una tormenta que esta a punto de desatarse entre los dos, torbellino que no quiero parar, huracán que debo dejar pasar para que se lleve todo a su paso arrasando con toda esta pasión que llevo por dentro, el rostro de Santos esta enrojecido por la emoción, me toma el rostro y vuelve a besarme nuestras lenguas se buscan se encuentran son como dos cuchillos afilados nuestros gemidos se ahogan por momentos nos separamos, primero le quito la camisa y luego el se  apodera de los tirantes del vestido sin dejar de mirarme, no llevo sujetador así que mis senos quedan a su alcance duros como una piedra los acaricia haciendo circulo no guardo silencio dejo que la excitación escape de mi boca lo deseo cuando se lleva uno a la boca, me tambaleo entonces sus manos me rodean y me llevan hasta una silla, comienza repartiendo besos dulces desde el cuello hasta el vientre bajo y es ahí donde termino húmeda lista para recibir su ataque y lo hace de un tirón se deshace de mi ropa interior y el dedo corazón se instala en mi carne con movimientos de adelante hacia atrás yo lo dejo hacer cierro los ojos disfrutando como comienzo a tocar la galaxia mas cercana a la tierra con el placer que provoca no obstante cuando estoy a punto su dedo es reemplazado por su boca, saboreando todo mi sexo su lengua es embriagadora penetra con fuerza hasta que grito su nombre y absorbe los restos de aquel orgasmo, logrando así tocar las estrellas.

—María Teresa dime ¿Cuales son tus fantasías para esta noche? Esa voz ronca varonil termina por traerme nuevamente a la realidad.

—Contigo quiero todo Santos hasta hacer el amor en esta silla, me gustaría hacerlo en la esperanza, en las caballerizas, el rió pero en este momento te necesito, aquí y ahora no digo aquello dos veces entre sus brazos estoy cuando cambiamos de posición y poco a poco me clavo en su miembro sintiendo como lo recibo su garganta hace ese ruido que tanto me gusta y cuando lo tengo dentro comienzo a moverme con destreza, busco su boca, mientras el apoya las manos sobre mis caderas para tomar el control de la situación, nuestro gemidos ahogados por nuestros besos terminan por ayudar a que lleguemos a la galaxia mas cercana su simiente llena todo mi interior y no necesito nada mas para sobrevivir.

—Contigo quiero todo Santos hasta hacer el amor en esta silla, me gustaría hacerlo en la esperanza, en las caballerizas, el rió pero en este momento te necesito, aquí y ahora no digo aquello dos veces entre sus brazos estoy cuando cambiamos de pos...

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—Amor tenemos que comer algo te veo exhausta  —Ahora estamos sobre la cama cubiertos con las sabanas de seda blancas y es que hacer el amor con Santos es algo que nunca para lo volvimos hacer sobre la cama y lo haría en cualquier parte de esta preciosa suite. 

Mi esperanza eres tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora