La obsesión del Mafioso. © (TERMINADA)[Aún Para Corregir] +21

✨️CAPÍTULO 4

CAPÍTULO 4

Matt:

Ajusto las mangas de mi camisa hasta los codos, mientras sigo sacando las pesadas cajas de madera del camión, para que los muchachos las suban al contenedor.

Este no es mi jodido trabajo, pero prefiero cerciorarme en persona de que este encargo llegue a su destino a tiempo. No puedo darme el lujo de quedar mal, menos en mi primera entrega con los latinos.

Demian es mi socio y un colega, pero eso no quita que es el jefe de la mafia latina. Y aunque dicen que en los negocios no hay lugar para la amistad, en este caso discrepo.

El y yo nos conocimos tiempo atrás en las jaulas de peleas y luego de casi matarnos mutuamente, nos hicimos colegas. ¿Quien diría que me lo volvería a encontrar en Los Ángeles y que terminaríamos haciendo negocios?

-Listo jefe, esta es la última. -Avisa Peter, el nuevo chico que aunque aun esta en entrenamiento, ha resultado ser bastante competente.

Asiento y tomo la barra metálica con la que hago palanca para abrir una de las cajas. Hago a un lado la espuma en trozos que cubre las armas y saco un rifle Brend 805 A1.

Inspecciono el arma de grueso calibre en mi mano y las municiones, confirmando que el rifle militar es perfecto y justo lo que me habían encargado.

Vuelvo a meter todo en su lugar y con un gesto de mi mano señalo para que comiencen a subir todo al barco.

La brisa del mar, se siente refrescante y tomo una inhalación profunda antes de soltar nuevamente el aire y girar la vista hacia el mar.

El sol esta a punto de ocultarse, haciendo que el azul del agua resalte con pequeños destellos brillosos, recordándome al azul de los ojos que no he podido quitarme de la cabeza desde hace días.

Esta mañana, como hago habitualmente, también he pasado por la cafetería, pero no he visto a la chica desde hace tres días y si cree, que puede ocultarse de mi, no tiene idea de con quien está tratando.

"-Soy una simple camarera, si. Pero no por eso puedes comprarme."

Sus palabras no han salido de mi cabeza. Hace mucho tiempo que ninguna mujer me hablaba como ella lo hace. Y admito que su carácter fuerte, hace que me resulte divertida y jodidamente interesante.

No como para proponerle matrimonio, claro. Las relaciones estables no son mi fuerte. Pero si para unas cuantas folladas.

Aunque hay algo en ella que me resulta peculiar. Sus ojos pese a la fiereza en ellos, las pocas veces que tuve la oportunidad de verlos de cerca, siempre se veían apagados.

Y a mi no puede engañarme, puedo ver a través de esos ojos de zafiro, que su personalidad hostil, es solo una fachada. Se muy bien lo que es vender una imagen falsa de ti al mundo. Es la forma en la que los cobardes decidimos lidiar con nuestras mierdas.

Así que... sea lo que sea que ocultas Lucy... lo voy a descubrir.

Sonrió antes de meter la mano en el bolsillo y sacar mi celular.
Rebusco entre los contactos, hasta que encuentro el número de teléfono que necesito. Aun no son ni las siete de la tarde, por lo cual estoy seguro de el sigue en Anny's.

La línea suena dos veces, tres, hasta que una chica responde.

-Cafetería Anny's... habla Megan, lamentablemente en este momento estamos cerrando pero...

-Necesito hablar con Jeffrey, dile que Larusso lo busca.

La línea queda en silencio un instante, antes de que se escuche el sonido de objetos moviéndose.