Nuestros labios guardan el secreto [Rivari]

¿Factor R?

Ari se regresó a su casa con un ataque de ansiedad invadiendo su cuerpo entró a la casa.
—Y? Qué pasó?— Dijo Nuvia al ver entrar a Ari cuando inmediatamente se dió cuenta del estado de ésta, con todo el maquillaje hecho desastre, lágrimas hasta cuello y dificultad al respirar.

—Wow, ¿qué pasó Ari?— ésta se lanzó a los brazos de Nuvia mientras sollozaba sin parar.

—Arruiné todo, te lo juro que lo arruiné todo. Todo es mi culpa— Repetía varias veces.

—Tranquila, Ari, cuéntame que pasó.

—Llegué a su casa y le pregunté para que habláramos, cuando vi a Félix en su casa... yo, no sé qué pasó, me entraron los putos celos y comencé a cuestionarle el por qué estaba él ahí y no se que me pasó, la cagué de nuevo, Nuvia... ya no sé qué hacer.

A Nuvia no le quedó más que abrazarla para consolarla.

                                   Pov Rivers

—Perdona si esto es culpa mía.

Rivers se acercó a él —No, no es tu culpa, ella... ella debe de actuar las cosas. Vamos, hay que seguir jugando.

Rivers, Félix y su amigo continuaron jugando, la rubia intentaba olvidar este amargo momento que había pasado hace unos minutos.

Rocío había llegado a Monterrey para hacer unos pendientes, como no conocía del todo Monterrey tenía que tener una guía turística, así que llamó a Rivers.

—¿Hola?— Dijo aquella rubia

—Am, Rivers, solo quería dejarte saber que estoy en Monterrey y si... podrías ser mi guía para salir a algunos buenos lugares antes de que me vaya, pero, solo es si quieres

—Si, le puedes caer en mi depa, yo te llevo a un buen restaurante y salimos a pasear, si gustas

—No sería raro para ti? porque si no quieres está bien

—No, está bien, creo que así podemos hablar un poco las cosas, no me incomoda para nada

—Bueno, llego a tu casa en quince, gracias