Mi culpa

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—Nuvia, se puede saber por qué me acaba de llamar Rivers y de qué me está hablando?


—De qué hablas?

—Me acaba de marcar Rivers contándome que estuviste espiándola todos estos días porque andaba con Rocío y pensó que yo te había enviado. ¿Por qué no me contaste? ¿Por qué lo haces?

—Yo solo quería saber si ella te estaba traicionando y por eso todo se puso así— Tartamudeó.

—Nuvia, nadie lo provocó más que yo, eso pasó entre nosotras y ahora me lanza la culpa porque piensa que soy una stalkeadora psicopata, encima lo hiciste a mis espaldas— Sus mejillas comenzaban a enrojecerse y sus ojos se tornaron brillosos.

—Yo no quería decirte para no verte peor, solo vi que necesitas un tiempo fuera de todo esta depresión que tienes— Tomó una envoltura de papitas de la mesa y la tira —No me gusta verte así, por eso decidí no decirte e investigar por mi cuenta.

Ari se levantó bruscamente del sofá —Investigar qué, Nuvia!? Que no lo entiendes? No querías verme así pero vas, acosas a Rivers y a Rocío para sacar información solo para hacerme sentir mejor? No, no es así. Ahora ella cree que yo te mandé cuando no tenía nada que ver con esto.

—Que importa que piense ella.

—A mi si importa. Si tú intención era ayudarme, aprecio el apoyo que me distes estos días pero ahora la cagaste mucho.

—Ari, hasta cuando seguirás así? Escondiendo tu tristeza en el sofá cubierta en comida chatarra? Ni siquiera haces un intento de estar mejor... ni siquiera de hablar con Rivers. Cómo podrán resolver las cosas si no reúnes fuerzas para intentar remediarlo? Alguien tenía que hacer algo, lo que sea.

—Pero no tú, ni nadie. Si alguien tiene que hacer algo soy yo, no necesito alguien más se meta.

—Venga, Ari pues hazlo! Hazlo si no quieres que nadie te ayude. Si no quieres que me meta... haz algo tú por estar bien.

Ari se levantó —No necesito que alguien acose a otros por ayudarme a mi, yo puedo arreglar las cosas que solo incluyen dos personas, no necesito que te metas.

El silencio invadió la sala.

—Bueno, lo que tú digas... ya no me vuelvo a meter por ayudarte, será mejor que me vaya de aquí— Tomó sus cosas y caminó hacia a la puerta —Espero salgas de esto.

En cuanto cerró la puerta Ari se desplomó en lágrimas. Sentía que el mundo se le caía encima, sin Rivers y ahora había ofendido a quien la había estado cuidando. Estaba sola y Ama estaba muy ocupada con su viaje como para poder acompañarla.

Sola, vacía y llena de culpa...










Sola, vacía y llena de culpa

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Nuestros labios guardan el secreto [Rivari]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora