«Acércate porque te odio.» - Jesús y Tú - Gemeliers

Capítulo siete.

¡Hola!

Antes que nada, quería deciros que me hace mucha ilusión cada vez que veo que me comentáis, pero un simple "sigue", aunque supongo que eso quiere decir que os gusta, no me dice si veis bien todo lo que va pasando en la novela, y no me deja saber qué debería cambiar, o no.

Me gustaría que me dijéseis todo lo que quisiérais que pasase, para tenerlo en cuenta, y poder introducirlo de alguna manera.

Los comentarios y los votos, son, al fin y al cabo, lo que me motiva a seguir, y a escribir con más constancia.

También me haríais un favorazo si difundiéseis la novela, siempre y cuando os guste, claro.

Podéis seguirme en twitter, si queréis: @mymadfatself . Siempre sigo de vuelta.

¡Muchas gracias! :)

Y ahora...
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Jesús y Dani llevaban un rato desayunando en completo silencio.

La tensión entre ellos podía cortarse con cuchillo, y su madre, que se encontraba sacando todo del lavavajillas, no tardó en darse cuenta.

- ¿Se puede saber qué os pasa a vosotros dos? - preguntó Eva, algo molesta por aquella situación.

- A mí nada. - Se apresuró a decir Jesús.

- No. Que tu hijo ahora se dedica a meterse con los amigos que traigo a casa, nada más. - Dani no pensaba cortarse, cada vez estaba más harto de la nueva actitud que estaba adoptando su hermano.

- ¿Pero qué dices? - dijo Jesús, subiendo el tono. - No es mi culpa que traigas a retrasados a casa. Una de las tías que trajo... -

- Se llama _____, y si yo traigo a retrasados, explícame qué se supone que es lo que traes tú... - espetó Dani, mucho más calmado que su hermano.

- Me la suda como se llame, y yo no traigo a gente tan subnormal. -

- Jesús, ni se te ocurra volver a hablar así eh, a ver qué te has creído. - Avisó Eva.

- Bueno, que sí. La cosa es que me tiró un vaso de agua encima, luego va y entra al baño sin permiso, cuando estaba yo dentro, y encima se me pone tonta. Pues qué quieres... guapa no la voy a llamar. -

- No, si es que no la tienes que llamar nada, ahí está el problema, bocas. Que eres un bocas. - Dani estaba empezando a subir el tono, también.

- Mamá, la chica está en mi grupo de historia, y nos llevamos genial. Le echó agua sin querer y este se puso como un energúmeno. Después, la mandé al baño, porque ella también se había mojado, y tres cuartas de lo mismo. Que yo creo que se quedó flipada... dime tú quien tiene la culpa. - Dani quiso dar su versión, sabiendo que aunque Jesús fuese su hermano, ______ era quien tenía la razón en esta ocasión.

Eva sabía que por mucho que Dani quería a su hermano, no soportaba las injusticias, y siempre defendía lo que él creía más justo, por lo que enseguida se hizo una idea de cual de las dos versiones se acercaba más a lo que de verdad había ocurrido, pero ella no iba a enfrentar a sus propios hijos.

De ninguna manera.

- Mira, eso es un tema vuestro, y yo no voy a meterme, aunque también os digo que en mi casa no se le falta el respeto a nadie, os lo llevo inculcando toda la vida, y me parece decepcionante que me vengáis con estas cosas a estas alturas. -

- Pero una cosa os digo, como sigáis en este plan, os quedáis sin play, sin tele, sin piscina, y sin salir de aquí. Hombre ya. Lleváis toda la vida siendo inseparables, y ha sido mudarnos, y volveros medio tontos. Hartita me tenéis ya. No quiero oír más retahílas eh, por parte de ninguno. -