Mi hermano es famoso (Harry Potter)

Sano y salvo

«¡¡¡Votad y comentad al final del capítulo por favor!!!»

-¡Harry cielo!- Se oyó a la señora Weasley gritar en la planta baja. Me limpié las lágrimas y bajé, tranquilamente, sin correr. Hazza estaba abrazando a Sirius.

-Harry.- Sonreí. Él se acercó a abrazarme, y me estrechó entre sus brazos.- Te extrañé hermano.- Le susurré para que solo él me oyera.

Se separó y me sonrió. Me dio un beso en la mejilla y fue a saludar a Hermione, Ginny y Ron.

-Chicos, vamos, la cena está lista.- Dijo Molly entrando al salón. Entramos, y me senté junto a Harry, y al lado de Sirius. Cuando terminamos de cenar, Molly sacó una tarta, con velas, y la puso entre Harry y yo.

-¡Tenéis que pedir un deseo!- Exclamó Tonks. Sonreí mentalmente por su euforia. Aún que lo encontraba algo, innecesario, divagué por mi mente a ver si encontraba algo que pedir.

Paseé la vista por la sala, hasta detenerme en Freddie. Recordé la última página del capítulo 31 del último libro, en la cual, se leían los gritos desesperados de Percy y Ron, para que volviera su hermano, a una vida que ya había dejado atrás. Y supe, que ese sería mi deseo, a pesar de que sería su muerte, la que más me aseguraría de evitar.

Dirigí mi vista a mi hermano, que me miró. Sonreímos, y a la par, soplamos las quince velas.

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- Lo siento. Lo siento. Es mi culpa...- Decía a Dumbledore.

-Dani... Danielle despierta...- Abrí los ojos, encontrándome con Hermione despertándome.- ¿Estás bien? Estabas gimoteando...

-Si. Estoy bien. Lo siento si te he despertado.- Me giré de espaldas a ella, y oí como suspiraba y se alejaba a su cama.

Llevaba semanas soñando lo mismo.

Después de que Harry apareciese con Cedric, en vez de acercarme como todo el mundo, salí corriendo hacia el castillo, hasta la ventana en la que Cedric Diggory descubrió que debía morir. Me apoyé en el cristal y una lágrima cayó por mi mejilla, seguida de muchas más.

Intenté hablar con Sandra durante los días próximos. Pero su hermano estaba siempre a su lado, y no se alejaba de ella. En el último banquete, con las banderas negras, rendimos tributo a Cedric. Fué el día siguiente que pude hablar con Sandra.

-Sandra.- Se giró y me abrazó.- Lo siento mucho Sandy. ¿Sabes? El me pidió, que en este caso, te dijera que el te quería, y que desea con todas sus fuerzas que seas feliz.- Me separé y me quedé agarrandola de los hombros. Y lo serás. Te pido que lo seas.

-Lo intentagé.- Hizo una mueca intentando sonreír.- Mantendgemos coggespondencia. ¿Vegdad?

-Por supuesto.- Madame Maxime las llamó, y tras un último abrazo, se fué con su hermano, quien se despidió de mi con la mano.

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Un día, mientras desayunábamos, recibimos dos cartas. Un era para mí, y la otra para la Orden del Fénix.

Abrí la mía. Era de Draco:

Querida Dani,

Laura ha desaparecido. No se sabe donde está. Yo si que lo sé. Fuí yo quién la secuestró. Le apliqué un obliviate y la dejé, desmayada, en un bosque, cerca de un pueblecito.