𝐓𝐡𝐞 𝐆𝐫𝐞𝐚𝐭 𝐖𝐚𝐫 | 𝐑𝐢𝐯𝐞𝐧

𝐱𝐯. not to fight anymore ✔️

The great war
chapter fifteen !
❝ not to fight anymore ❞
pobres almas sin sol; pt2

Los especialistas seguían enfocados en entrenar duro para pelear contra los brujos de sangre. Después de la muerte de Rosalind, Silva había recuperado el control total de los entrenamientos, pero Alfea ya no tenía la protección mental de Rosalind y solo quedaba tener fé en los estudiantes.

Por eso mismo y como de costumbre, todos los alumnos entrenaban por las mañanas para perfeccionar sus habilidades.

Aquella mañana, Riven optó por practicar su tiro con el arco.

Fae caminaba a lo largo del campo después de una práctica de combate con Gaia. Se detuvo al distinguir la figura de Riven a una corta distancia, aunque ciertamente ya no había casi nadie a sus alrededores, pues todos estaban almorzando.

Ella sonrió burlona cuando Riven falló el tiro, supuso que no era la primera vez.

—¡Esto es una mierda!—Se quejó al aire.

Fae caminó perezosamente hacia él. —La última vez pensé que Beatrix era el problema, pero ahora creo que fue una excusa— Dijo llamando la atención de sus ojos grises—. Eres malo.

Él bufó. —No todos nacimos con una puntería excelente.

—¿Eso fue un cumplido? —Se burló justo cuando Riven gruñó, alzando su brazo para intentarlo de nuevo—. ¡Espera! —Riven detuvo sus movimientos, justo cuando los ojos de Fae brillaron en duda—. Tienes... tienes que...

Ella suspiró antes de acercarse a él.

—No necesito ayuda —Carraspeó.

—Créeme la necesitas —Le tendió una flecha.

Él la miró cortamente antes de aceptar  cansado, tomó la flecha aceptando su ayuda.

—Veamos tu postura —Ella se cruzó de brazos junto a él, analizándolo de arriba a abajo.

Riven colocó la flecha en el arco, tomandoló con su mano frontal y jalando la flecha con el brazo que le sobró. Fae ocultó una sonrisa bajo su mano al ver que el castaño estaba tan frustrado que ni siquiera estaba al tanto de su postura mal hecha. Notó que el brazo que jalaba la flecha estaba alzado a la altura de su cabeza, y en ese momento entendió cual era el problema.

Inconsciente, estiró su brazo para colocarlo sobre su hombro y así poder bajar su brazo.

—Baja un poco el brazo, solo un poco —Susurró para ellos dos. Riven se tensó ligeramente bajo su tacto, ya que la delgada tela del uniforme de especialista era como una segunda capa de piel para él, así que sentía su toque a la perfección—. Tu boca es tu ancla —Riven apartó la mirada de la diana solo para mirar a Fae, confundido—. Sabes a lo que me refiero.

Riven rodó sus ojos, pero aún así obedeció.

Fae soltó su hombro para retroceder un poco y analizar su postura, sus rodillas ya no estaban flexionadas, y su brazo estaba a la altura correcta, todo parecía estar bien hasta que sus ojos llegaron a la mano que sosteniendo el arco de la parte frontal.

—Relaja la mano —Riven contuvo la respiración cuando la mano de Fae se posó sobre la suya, sus dedos acariciaron suavemente sus nudillos, y en ese momento se dió cuenta de lo fuerte que lo estaba sosteniendo—. Y recuerda respirar.