Capítulo 11: Hot

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Kiki POV +18

Lucía me abrió la puerta en lencería negra y con los labios entre abiertos. No había tenido tiempo de cruzar la puerta cuando tiró de mi chupa de cuero hacia dentro de la casa.

- ¿Tanto te pongo que no vas a preguntarme ni cómo estoy? -  le pregunté con sonrisa de superioridad.

Lucía me cogio de la mano dió dos pasos hacia atras para poder admirarme bien. Me repasó de arriba abajo con lujuria en su mirada y se acerco a mi boca para susurrarme.

- Súper hot.

Los besos salvajes empezaron a dar rienda a nuestra quedada. Mi chupa se quedó en la entrada, mi top crop en el pasillo, los pantalones cargo en el salón y las botas ni me acuerdo. Lucía me besaba con intensidad, con desesperación. Como si mi cuerpo le hicese tanta falta que podría morir por él y con él. Me gustaba sentirme así de deseada.

- Fóllame Chiara. Lo necesito tanto como tú.

"Lo necesito tanto como tú" fue escuchar esa frase y darme cuenta del verdadero motivo por el cual había llamado a Lucía. Olvidar. Quería olvidar.

Me separé de su cuerpo y la tomé de la mano para llevarla a su habitación. La tiré con decisión a la cama mientras ella me miraba triunfante. Sin quitar mis ojos de los suyos me deshice del resto de ropa interior quedandome completamente desnuda ante ella.

Ver su sonrisa de victoria y sus ojos bañados en lujuría me hacía sentir bien. Las pupilas se me dilataron y me prometí que no iba a pensar más.

Me dejé caer sobre la rubia y empezé a besarla por el cuello mientras mis manos habilidosas se liberaban de su sujetador. Mi boca empezo a recorrer su cuello mientras mi pierna encontró el lugar perfecto entre las suyas. Un vaiven de caderas empezó entre nosotras.

Disfrutaba mucho cuando hacía disfrutar a otra chica. Mi placer propio siempre había estado en segundo plano, tampoco es algo que me gustara demasiado descubrir.

- Uf... - suspiró Lucía.

Entendí que quería más y allí estaba yo para darle más.

Mis manos empezaron a recorrer su cuerpo y mi boca fue bajando de su cuello a su pecho. Los pezones empezaron a ponerse erectos con el tacto de mi lengua sobre ellos. Me dedique a succionar, lamer y chupar con desesperación, como siempre hacia.

Con Lucía no habia cosas nuevas, ni descubrimientos, el baile estaba totalmente ensayado.

Volví a su boca y las embestidas empezaron a ser más evidentes. Más aceleradas. Decidí que no quería esperar más. Le quite las bragas y bajé hasta su intimidad.

No quería entretenerme y hacerla sufrir, no era mi estilo. Yo era mucho más directa, más aquí te pillo aquí te mato. Los preliminares no estaban hechos para mi, no en exceso.

Comencé a comerle todo el clítoris. Lucía se aceleraba, arqueaba su cuerpo y terminaba explotando en un orgasmo brutal.

Separé mi cara de su entrepierna y me senté sobre sus caderas mientras la miraba complaciente.

- Me parece que te he dejado caótica.

- Lucía sonreía. Ahora vas tú.

Me bajo con brutalidad y me dejó debajo de ella. La miré a los ojos sonriendo.

- ¿Sabes que me apetece?

- ¿Qué?

- Tequila. - sentencié.

Ella se quedó un poco descolocada pero tampoco sorprendida. No era la primera vez que no me apetecía continuar conmigo misma. Yo ya me había saciado. Me había calmado y ahora... quería emborracharme.

- ¿Y la moto?

- Eso es problema de la Chiara de mañana. - le sonreí.

- ¿Todo bien Kiks? - me preguntó preocupada.

- Ya sabes como soy, todo bien. - le apreté con cariño el brazo mientras seguía debajo de ella.

Lucía se levanto de un salto de la cama.

- Pues venga melona. Ponte las pilas que en casa no hay tequila. Nos vamos de fiesta.

Sonreí, me apetecía un montón.



Kiki nominada... ¿Que os parece? Depresión. ¡A salvar a la Guiri!


The kisseable girl - KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora