𝟬𝟮𝟰

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— ¿Sabes tocar la guitarra?

— Eso, y muchas cosas más.
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— Hola hola —Delia se agachó para saludar a sus dos mascotas que habían corrido para acercarse a ella—. ¡¿Matías, estás en casa?! —alzó la voz para que el chico la pudiese escuchar desde cualquier lado.

— ¡Estamos acá! —la chica dirigió su mirada a la puerta de cristal que daba para la parte de atrás.

Caminó hacia allí, saliendo por la puerta, encontrando a Matías, Enzo, Agustín y Lara con la hoguera encendida, además cada uno con una manta.

— Vaya ambiente —rio la chica.

— ¿Qué tal hoy? —Matías alzó su mano para que la agarrase la chica, esta no lo pensó mucho y la cogió, notando el contraste de la mano caliente de él, con la suya fría.

— Bien, nos reímos mucho —saludó con su mano libre y con una sonrisa al resto del grupo—. ¿Y vosotros? —hizo referencia a la búsqueda de esmoquins.

— Agotador, pero los encontramos —se sonrieron—. Cambiate y vení para acá.

Delia asintió para volver a entrar en la cabaña y cambiarse de ropa, sin olvidarse de colocarse una sudadera para evitar el frío. Y cuando estuvo lista salió, dejando que sus mascotas también fueran.

— ¿No tenés miedo de que se escapen? —Agus preguntó al ver como el perro se tumbaba cerca de la hoguera y como el gato se subía en las piernas de Enzo, el cual estuvo encantado de tenerlo.

— Que va, Robin es muy apegado a mi, él no se escapa, y a Batman le da miedo la arena de la playa, por lo que aquí no pasa nada, pero si tengo que tener cuidado con la puerta de la entrada —explicó.

Matías alzó por un lado su manta para que la chica se pudiese acomodar ahí, y ella lo hizo, acercando más su cuerpo al del chico, ya que la manta era pequeña y hacía demasiado frío.

— ¿Y esa guitarra? —señaló al instrumento que se encontraba a un lado.

— La trajo Agus y la estuve tocando un poco —Matías le contestó, ya que el trío de amigos estaban embobados por el gato.

Falling Fast  |  Matías Recalt Donde viven las historias. Descúbrelo ahora