Hilo Rojo ~ Haobin

Ep. 28 - ¡Feliz año nuevo!

Ya era otro año, nuevas metas, nuevas experiencias, nuevo todo. Hanbin me había llevado a una fiesta en el departamento de un conocido suyo, el piso era alto, al entrar vimos a muchas personas bailando.

Hanbin siempre fue muy popular, apenas ingresó todo se voltearon a verlo y dejaron lo que estaban haciendo para ir a saludarlo. Mientras yo me quedaba en un rincón a esperar que termine de hablar con todos.

Me apoyé en la pared y me detuve a observar alrededor, algunas bailaban, otros simplemente estaban sentados tomando, algunos fumaban otros se drogaban. El ambiente no era para nada mi estilo y me estaba comenzando a aburrir de esto. Pensé seriamente en comentárselo a Hanbin después.

De pronto, una pareja de un chico y una chica empezaron a besarse de manera muy intensa en el sofá. Incluso llegaron a tomarse y quitarse la ropa, por un momento pensé que de verdad iban a tener sexo ahí mismo, pero al final, uno de los encargados de la fiesta se acercó a ellos, creí que los iban a expulsar de la fiesta, pero en lugar de eso, los invitaron a pasar a una de las habitaciones para que continúen con lo suyo.

Me sentí incómodo al presenciar eso, ¿en serio lo iban a hacer en la casa de alguien más usando la cama donde otra persona duerme?, sin duda es algo que yo jamás en mi vida haría, me moriría de la vergüenza si me pasara algo así.

-Ya vine, bebé, ¿quieres? -me ofreció un vaso de cerveza, pero yo de inmediato negué con la cabeza -¿es año nuevo y no vas a beber?

-Ya sabes que no me gusta

-Pero es una última vez, en un rato será año nuevo y ahí ya podrás dejar de beber si quieres, como un borrón y cuenta nueva de todo

Lo pensé por unos segundos, estaba a punto se negarme de nuevo pero sabía que él estaría de insistente toda la noche así que finalmente acepté.

Bebí un poco sintiendo el olor inundando mi nariz, era horrible, jamás me iba a acostumbrar al alcohol así lo pruebe 100 veces más.

-¿Quieres bailar? -me ofreció después de estar un largo rato tomando

-Claro

Le tomé la mano y empezamos a movernos al ritmo de la música, él aprovechó para tocar suavemente mis caderas. De repente, sin querer me dieron ganas de ir al baño.

-La cerveza te hizo efecto tan rápido -dijo él en forma de burla, yo sólo lo ignoré y me fui al baño

Había tantos hombres amontonados en los mingitorios que me dio vergüenza pararme al lado de alguno de ellos, así que me metí dentro de un cubículo.

Al terminar, salí de este viendo que el número de personas había reducido, de inmediato me lavé las manos y al querer salir, un chico me impidió el paso.

-Hola, ¿viniste solo? -eres evidente que quería algo más, quise pasar por el lado pero se ponía delante en cualquier dirección que iba

-Tengo novio -respondí evadiendo su mirada, estaba muy incómodo

-¿Y eso importa? -respondió con evidente narcisismo -no se va a enterar su tu y yo hacemos algunas cosas prohibidas

Idiota

-¡Wonbin! -la voz de Hanbin entrando al baño me hizo suspirar aliviado -¿qué estás haciendo con mi novio?

-¿Novio? -su expresión narcisista cambió a una de nerviosismo -oh... no sabía que él era tu novio, lo-lo siento

-Si quieres meterte en relaciones de la gente, hazlo, pero no con mi chico -su mirada amenazadora intimidó a aquel otro chico quien salió cabizbajo del lugar

-Qué bueno que viniste -dije feliz -él no me dejaba salir

-Es un maldito idiota -suspiró pesadamente -no intentó hacer nada más, ¿no?

-No -negué más tranquilo

-La próxima vez que quieras ir al baño te voy a acompañar

Me tomó la mano con fuerza volviendo a salir a la fiesta, esta se había vuelto más ruidosa que antes y muchas más personas estaban en la sala bailando. Hanbin al notar eso me llevó hasta el balcón, en el cuál se apoyó en las barandas. Sacó un cigarrillo y lo prendió comenzado a fumar.

En ese momento, al ver la pista, muchos metros bajo nosotros, noté a unas chicas que se estaban maquillando y arreglando el cabello antes de entrar al edificio. Recordé que todas las personas del lugar estaban muy bien maquilladas y pensé en que me gustaría aprender a hacerlo también. Se veía lindo.

-Hanbin... -mirada el cielo observando algunos fuegos artificiales a lo lejos -ahora que falta poco para año nuevo, quería pedirte algo...

-¿Qué cosa? -tomó otro cigarrillo a punto de prenderlo

-Que dejes de fumar...

Él se quedó estático unos segundos y volteó a mirarme fijamente sorprendido.

-¿Que deje de fumar?

-S-sí... creo que debes ser consciente que eso no te hace bien a la salud, y tampoco para la mía, ya que fumas delante mío, ese humo yo lo aspiro

-Pensé que te gustaba

-Yo... lo hacía porque me lo pedías -frunció el mentón -no quería decirte que no, así que acepté, al igual que el alcohol y las fiestas, yo aceptaba por ti, pero en realidad no me gusta

Después de decir eso me sentí mal, pero era peor guardarme lo que pensaba durante meses. Hanbin se quedó mirando fijamente a la casa de enfrente, pensativo, sin expresión, hasta que después de unos segundos dijo una palabra.

-Está bien -me entregó el cigarrillo -voy a dejar de fumar, beber e ir a fiestas por ti

-¡¿En serio?! -mis ojos se iluminaron como nunca

-Si tu empezaste a hacer cosas que no hacías por mí, creo que yo podría dejar de hacer cosas que suelo hacer por ti -dijo de una manera tan linda haciendo que mi corazón se derrita

-Te amo -me colgué de su cuello escuchando como él reía por lo bajo

-¿Quieres ir a la casa a acostarnos un rato?

-¡Claro que sí! -respondí con emoción

Dejó su lata de cerveza a un lado y salió de la fiesta sin despedirse de nada. De pronto, los fuegos artificiales se hicieron más fuertes, eso quería decir que ya eran las doce. Hanbin, como si fuera lo último que haga empezó a tocar los timbres de todas las casas que encontraba delante a pesar que le diga que se detenga.

Su mano apretaba la mía con fuerza y al adrenalina de que alguien vaya a salir en el tiempo exacto y nos viera invadía mi piel, sin embargo, seguía riendo junto a él.

-¡Feliz año nuevo! -gritó