Bler Hawkins es una chica que ha pasado toda su vida en las abusadoras manos de su arrogante familia, pero todo eso cambia cuando su familia consiguió un pretendiente para casar a su prima, Sofía, la cual fue ignorada por los ojos de este pretendie...
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— Enserio crees que eso nacerá? Su corazón es débil... Morirá. — Dice Rya en un trace de horror. Mirándome fijamente.
— "Eso" a lo que llamas es un bebé, ¡Mi bebé! Te agradecería que te ahorres tus pensamientos limitados, querida. — Respondo con mis manos frías y mi corazón radiando enojo.
No suelo desquitarme el enojo que tengo con Aizen, con otras persona... pero Rya a alcanzado la cuerda floja en mi.
— Rya solo intentaba advertirle, Usted no pertenece a nuestra raza, por lo que no puede saber la gravedad que puede tener este embarazo amenazando su vida, pero claro no es como si de verdad nos importara. — Añade Seren.
— Es cierto, lastimosamente no comparto su raza, pero pertenezco a la raza de los magos y eso es suficiente. No necesito que me digan el riesgo que corro, eso ya lo sé. —Digo aclarando puntos. — Pero quien decide por el futuro de mi hijo soy yo, no importa quién se enoje o no. Yo decido!
Me levanto de aquella mesa como puedo. Y salgo de allí mientras Rudi y Daren me siguen.
— Bien hecho, Majestad. — Dice Rudi levemente.
— Esto se volverá otra guerra sin sentido. —Dije tocando mi cabeza debido a que siento algo de dolor. —¿Rudi, qué tenemos hoy?
— Pues, Majestad... su horario está en blanco.
— ¿Cómo?
— Verá, Su majestad Aizen ordenó que canceláramos todas sus actividades hasta que el lo ordene. Lamentablemente sólo están las citas programadas para ver al señor Taitus y este al tanto de su embarazo.— Dice.
— Vuelve a poner mis deberes como antes. Tengo muchas cosas que hacer y estoy en salud aún. — Digo algo fastidiada.
— Bler sabes que no puedo revertir las órdenes de su majestad, nadie puede. Aunque deberías aprovechar esto para descansar. Un embarazo es muy riesgoso y más...
— Rudi no te pedí tu opinión personal, por lo tanto ahórratelas.
— Lo siento, Majestad.
Mis hormonas no estaban bien el día de hoy. Siento mi furia esta tocada a todos últimamente, y enserio quiero controlarme, pero ya no tengo mucha paciencia. Y por otro lado no entiendo a Aizen, Elimina todas mis actividades no hará que yo reconsidere sus deseos de matar a mi bebé. Es mío y nadie me los va a quitar.
—Ustedes no pueden desobedecer al rey, pero yo si. ¿Te acuerdas de cuál era mi primera actividad de hoy? — Preguntó, Y Rudi casi se oponía. Pero me lo comunicó.
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