AIZEN. Ⓒ

Capitulo 44~ Ducado de las Bestias ll.

El banquete había empezado y una vez listos. Aizen y yo bajamos al salón principal para ser recibidos noblemente. Normalmente los banquetes son aburridos y mucha platica, pero este era mucho más que eso. Muchas personas bailaban y disfrutaban sin importan las etiquetas.
Aizen no soltó mi mano incluso cuando tomamos asientos. Mi mejillas estaban coloradas al pensar que hacen una hora estábamos tocándonos desesperadamente en la habitación.

Nuestras miradas chocaban cada segundos, y sonreíamos como dos tortolitos. Resolver nuestros problemas de este modo no está tan mal. Aunque mi cuerpo duele un poco a pesar del "Supuesto cuidado" que Aizen debía tener al tocarme.

—Disculpen las molestias majestades, — Dice Urus "El Búho que me ha estado encargado de nuestra comodidad". — Nos honrarían que aceptaran los buenos deseos de nuestro pueblo para el futuro heredero del reino de Khorne.

Mi sorpresa era evidente, pues aún no habíamos informado de mi embarazo al reino, a excepción de la familia real. Observó detrás de Urus y noto como la gran mayoría observaba felizmente hacia acá.
Creo que fue mala idea salir en público en mi estado. Mientras mi hijo crece, es mas fácil detectar otro corazón latiendo dentro de mi. ¿Le molestará esto a Aizen?.
Volteo mi rostro para encontrarme el de Aizen el cual no esta enojado, pero tampoco expresaba una mirada de agrado, o al menos eso es lo que creí hasta que...

— Adelante. — Dice y Urus agradece agachando un poco su cabeza.

De pronto veo como la multitud va dejando el centro del salón limpio. Como si esperaran que alguien caminara. Y no me equivoco, veo como personas vestidas iguales empiezan a avanzar hacia el medio. La música empezó a soñar y vemos como sus cuerpos producían un tipo de movimientos similares. Era una danza muy bonita.
Mi rostro aparte de estar un poco confundida estaba alegre de ver aquel hermoso detalle.

— La danza de Bienvenida. — Me susurra Aizen sin dejar de ver al frente. — Es algo sagrado para ellos , ya que así reciben el nacimiento de sus descendientes. Normalmente solo la recrean cuando un miembro de la familia que lidera esta ducado nace.

— Ya veo. Que honor que le dediquen esto a nuestro hijo. — Digo sin dejar de ver aquel espectáculo.

No podía describir con certeza aquel majestuoso escenario. Pero quede muy satisfecha. Una vez terminó, todos aplaudimos en honor a sus esfuerzos.

— ¿Que les pareció? Esta danza viene de generación en generación de nuestros ancestros y para nosotros es más que un honor desearle buena salud al próximo heredero de Khorne. – Dice Dretto confiablemente.

— Gracias a ustedes por desearle buenos deseos a nuestro hijo. Jamás olvidaré este acto de unión. — Respondo con una sonrisa.

— Por favor es un honor para nosotros. Sigan disfrutando. — Nos responde con un gran carisma para luego alejarse.

— ¿Quieres dar una vuelta? — Pregunta Aizen y volteo a verlo el cual crea una sonrisa de lado.
Silenciosamente salimos de aquel lugar adentrándonos a los oscuros pasillos aunque la noche era brillosa y radiante. Aizen me condujo a una especie de jardín, un Jardín muy voluptuoso a pesar de. Las luciérnagas alumbraban cada rincón y aquella aura tan mágica era sorprendente. Elevo una de mis manos y una de ellas se coloca encima. No evito sonreír tan alegremente.

— Son hermosas.

— Si lo son. — Responde Aizen sin dejar de mirarme. Me sonroja ya que siento como solo disfruta de mi sonrisa dejando a las luciérnagas y luces aun lado.