Yu Jimin — 05 de octubre del 2024
Dos días habían pasado desde el angustiante suceso en el bosque. Estábamos en la sala de mi casa desayunando, vi cómo mi amiga llevaba un gran bocado de galleta a la boca, saboreando cada migaja.
—Oye Gigi, solo vamos a la ciudad, no es nuestro último desayuno —mencioné mientras la veía abrir sus ojos de par en par. Ni siquiera podía hablar de lo llena que estaban sus mejillas.
—Lo siento, Jimin, es que adoro tus galletas. ¿No me podrías regalar algunas para mi desayuno? ¿No te quieres casar conmigo? Así tendría galletas infinitas —luego de eso, la castaña se puso de pie y dejó un pequeño beso sobre mi cabeza.
—Me vas a dejar tus migas, ¿qué haces? —me quejé, sacudiendo mi cabello. Efectivamente, había dejado migas de galleta.
—Llevo un tiempo sin ir a la ciudad, la última vez que fui era para dar una clase de biología en la universidad —mencionó Giselle.
Mi mejor amiga era conocida en el pueblo por su gran inteligencia, era profesora de múltiples áreas, pero su especialidad eran biología e historia. Actualmente solo trabajaba en las escuelas del pueblo, pero de vez en cuando daba conferencias en otras ciudades.
—La última vez que estuve allí fue cuando me recibí —agregué, guardando un par de libretas en mi bolso.
—Debería llevar ¿cebollas? —inquirí, mirando directamente al estante de verduras.
Giselle soltó una carcajada mientras llevaba una mano a su abdomen.
—¿De qué te ríes, idiota? —solté un pequeño gruñido en señal de molestia.
Ella se detuvo y se secó una lágrima.
—¿Planeas cocinarle algo a la vampira o qué, Ji? —no entendía a qué se refería, fruncí el ceño mientras me cruzaba de brazos.
—¿Acaso no son las cebollas el repelente de vampiro? —nuevamente rió.
Como respuesta, tomé una almohada del sillón y se la arrojé en el rostro.
—No, tonta. En todo caso, sería ajo, pero con todas las vacunas que se inventaron, no le harían ni un rasguño —asentí a sus palabras mientras tomaba mi bolso y lo colocaba en mi espalda.
Quizás debía releer los libros de criaturas no naturales, estaba bastante oxidada en eso.
Giselle y yo habíamos decidido emprender un pequeño viaje a la ciudad para reunirnos con Kim Minjeong, la líder de los vampiros y dueña de una cadena de hoteles en todo el condado. Aunque sabía poco de ella, me intrigaba su misterio y su forma de liderar.
Siempre se mantenía en el anonimato, delegando tareas a sus vampiros en lugar de enfrentar directamente las situaciones. Era algo que me parecía patético para alguien que se consideraba líder. En mi opinión, un verdadero líder debe estar dispuesto a dar la cara por su grupo, asumir la responsabilidad y tomar decisiones difíciles.
Preparé mi mente para el encuentro, recordando las palabras sabias de mis ancestros y buscando la fortaleza necesaria para enfrentar cualquier obstáculo que se presentara en nuestro camino.
Nuestro hogar era conocido como el "Pueblo del bosque" localizado en el Bosque de Sherwood al norte del condado de Nottinghamsire, Nottingham era una ciudad donde miles de vampiros convivían día a día con los humanos de forma pacífica, según los reportes.
Entre el bosque y las urbes había una distancia de aproximadamente 30 kilómetros por lo que en auto demoramos menos de 45 minutos.
Al llegar, nos dirigimos directamente al edificio donde supuestamente vivía Minjeong. El paisaje urbano contrastaba fuertemente con la tranquilidad del bosque al que estábamos acostumbradas.
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Cruzada, Sangre y Luna [WINRINA 1]
FantasyEn el Bosque de Sherwood, una serie de muertes misteriosas desata el temor entre las criaturas del lugar. Yu Jimin, alfa de los licántropos, investiga y encuentra a Kim Minjeong, líder vampiro, entre los sospechosos. ¿Podrán estas mujeres dejar de...