Cruzada, Sangre y Luna [WINRINA 1]

44: Más allá del pueblo

Kim Minjeong 19 de diciembre del 2024

Dos días habían pasado desde la fiesta. Hace unas horas había tomado la iniciativa de visitar el pueblo de mi novia, e invitarla a una cafetería, hasta allí todo fue bastante normal. Pero al ingresar a su hogar, nos llevamos una gran sorpresa.

Observé como una gota de sudor bajaba por la frente de la alfa, tragó de forma nerviosa mientras sus ojos viajaban por aquel papel, sus manos temblorosas se sacudían dejando a la vista el selló rojo tan elegante con el escudo de la Orden Europea. Al parecer el cartero la había dejado aquí cuando ella no estaba.

Pero claramente estábamos en graves problemas, la maldita Orden Europea era nuestra autoridad máxima en el continente, estaba constituida por un integrante de cada especie. La loba me tendió la nota, mientras yo pasaba saliva de forma áspera por mi garganta.

"Estimadas Kim Minjeong, Líder del Clan de Moonrise de la Ciudad de Nottingham, y Yu Jimin, Alfa de la Manada de Sherwood:

La presente comunicación tiene como fin convocar su presencia en el Juzgado de Mansfield el próximo 21 de diciembre. Esta convocatoria se realiza con el propósito de abordar el presunto incumplimiento del Apartado 3 del Tratado de Paz y el Artículo 16 de las Convivencias Pacíficas por Especies, los cuales han sido identificados como temas de relevancia y preocupación para La Orden Europea.

Es de suma importancia que su presencia sea confirmada y que asistan debidamente preparadas para abordar las cuestiones que serán discutidas durante esta sesión judicial.

Agradecemos su atención y cooperación en este asunto.

Atentamente,

Dimarco Antuan, representante de los humanos de la Orden Europea."

En la Orden Europea quien establecían las leyes para mantener el control y la paz, tanto el apartado 3 como articulo 16 eran claros con la tolerancia cero a los ataques entre especies, pero especialmente a que un vampiro muerda a un licantrópico, y viceversa. Aquello era castigado con años de prisión dependiendo la gravedad del asunto. Los vampiros incluso, pagaban con la eternidad tras las rejas si no podía justificarse.

Un silencio pesado nos rodeaba y ninguna parecía saber que decir al respecto, ambas conocíamos perfectamente las consecuencias de mordernos mutuamente, pero incluso en mi mente la idea de afrontar aquello estaba bastante lejos.

—Bueno, es nuestro fin —dijo sin más la pelinegra cerrando la nota.

—¿Cómo se enteraron? —pregunté frunciendo el ceño. En ese momento Jimin abrió grandemente sus ojos y luego cerró sus puños con fuerza.

—El idiota de Jackson.

Aquello tenía completo sentido, esa noche ese molesto sujeto insinuó algo sobre nuestras marcas. Pero ahora no era nuestro mayor problema.

Sabía que debíamos actuar con cautela y buscar una solución que pudiera evitar lo peor.

—No podemos quedarnos de brazos cruzados —murmuré, buscando alguna excusa que justificara nuestra acción.

—¡Carajo! —dijo llevando sus manos a la sien— ¿qué vamos a hacer ahora? Podríamos ir a prisión Minjeong.

—No iremos a prisión mi amor, encontraremos una solución —comenté con la esperanza de calmar sus nervios, pero eran en vano.

Ella negó caminando de un lado al otro, sus pasos golpeaban el suelo y causaban un efecto de eco dentro de la sala.

—¿Qué vamos a decir? No tenemos una justificación, solo lo hicimos por placer.