Kim Minjeong ― 15 de octubre del 2024
Interrogar a Kenta Comada estaba resultando un fracaso, ya habían pasado 4 horas y aún no lográbamos obtener información. Ni siquiera los puñetazos que le di servían, realmente no estaba dispuesto a hablar.
Jimin había sido la última en intentarlo, pero lo único que ocurrió fue que lo dejó inconsciente después de golpearlo. Ya había incluso bajado el sol, miraba por la ventana suspirando cuando la loba se aproximó.
―Si a la siguiente no habla, úsalo como saco de sangre ―soltó, llevando una mano a su sien.
Me limité a asentir.
―Debe haber algo que sirva para sacarle información, alguna esposa o algo que sirva para chantajear ―sugerí, comenzando a buscar fotos en la casa.
Pero parecía un sujeto solitario. ¡Qué gran decepción, este hombre estaba solo! Ya impaciente, decidí ir afuera un momento, Jimin me siguió.
―Espero que no me estén buscando en casa ―comentó mientras se sentaba en las escaleras de la entrada.
―¿Vives con alguien? ―pregunté, curiosa. Ella negó.
―Técnicamente vivo sola, pero como mi abuelo y hermano son vecinos, siempre andan por mi casa como si nada, incluso tienen sus propias llaves ―respondió sonriendo.
―Y ¿qué hay de tus padres?
Aquella pregunta pareció afectarle, noté cómo su semblante cambiaba a uno más serio.
―Hace años que no viven con nosotros, se fueron, no sé dónde...
Por la información que tenía de Jimin sabía que Wonbin era el nombre de su hermano menor, a diferencia de ella, era un beta.
En ese momento, ambas escuchamos un sonido que provenía del interior de la casa. Rápidamente entramos y la imagen que encontramos fue al sujeto tosiendo sangre. Sus ojos estaban clavados en mí, me acerqué.
―Ya estoy bastante cansada de usted. Como ya es tarde, con mi compañera lo vamos a dejar descansar esta noche. Mañana, cuando vuelva, espero tener mis respuestas ―hablé, agarrando la silla mientras lo arrastraba a un pequeño cuarto que estaba en el primer piso.
Saqué mi cinta y se la coloqué en la boca. La alfa me miró curiosa. Luego de asegurarme de que no pudiera escapar, cerré la puerta.
―Jimin, creo que deberías volver con tu manada. Mañana volveré, si quieres venir ―dije con desdén.
Ella por otro lado parecía pensativa.
―Por la mañana no creo que pueda venir, va a ir una cliente muy importante al viñedo y no confío en Wonbin aún para dejarlo a cargo ―respondió, frunciendo el ceño.
La familia de Jimin era muy conocida en el país por su producción de vinos. Supongo que ella debía trabajar allí.
―Bueno, no te preocupes, yo me haré cargo. No es la primera vez que interrogo a alguien.
Aquello era verdad, tener 250 años me había regalado todo tipo de experiencias, y ser líder también. Interrogar era algo divertido para mí, siempre lograba obtener información rápidamente. Aunque con Kenta no estaba funcionando.
Comencé a caminar en dirección a mi vehículo, cuando finalmente estaba a punto de subir escuché su voz apenada.
―¿Me podrías llevar? Es que mi auto quedó en la entrada del bosque ―confesó bajando la voz. Por un momento me pareció tierna su expresión.
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Cruzada, Sangre y Luna [WINRINA 1]
FantasyEn el Bosque de Sherwood, una serie de muertes misteriosas desata el temor entre las criaturas del lugar. Yu Jimin, alfa de los licántropos, investiga y encuentra a Kim Minjeong, líder vampiro, entre los sospechosos. ¿Podrán estas mujeres dejar de...