Cruzada, Sangre y Luna [WINRINA 1]

41: La propuesta

Yu Jimin – 16 de diciembre del 2024

Los movimientos de Minjeong interrumpieron mis agradables sueños, llevándome a abrir lentamente los ojos, mis brazos envolvían su cuerpo asegurándome de que no pudiera escapar. Ninguna llevaba prendas de ropa ya que la noche había sido bastante calurosa entre ambas.

Luego de nuestra conversación por la noche contactar a mis padres parecía una idea importante si queríamos reunir la mayor cantidad de información posible, tal vez nunca me sentiría lista para superar el abandono y las responsabilidades que debí afrontar, pero el riesgo de miles de vida era más importante que un inconveniente familiar.

Aunque en este preciso momento solo quería dar lugar a reclamar los besos de la vampira, quien volteó ligeramente observándome sonriente. Su rostro de recién levantada era muy adorable, lentamente estiré mi mano para acariciar su mejilla.

—Buenos días mi vida —murmuró tapando su cara con la sabana dejando a la vista solo sus orbes rojos.

—Has estado utilizando apodos muy lindos conmigo, ¿por qué?

—Porque me gustas y quiero usarlos, ¿no te gustan? —respondió mientras se incorporaba en la cama dejando a la vista sus desnudos pechos.

Tragué fuertemente intentando pensar en otra cosa que no fueran sus manos haciéndome gritar, pero era casi imposible.

—¿Tomamos una ducha juntas? —alcé mis ojos sintiendo como mis mejillas aumentaban su temperatura.

Aquella propuesta hizo que mi corazón latiera con fuerza, aunque mi mente intentaba mantener la compostura ante su sugerencia tan directa.

—Sí, me encantaría —respondí dejando escapar una sonrisa tímida.

Ambas nos levantamos de la cama silenciosamente, mientras observaba sus pasos hacia el baño de mi habitación, un poco avergonzada por mi desnudez tomé una toalla del armario y la envolví para acompañarla, el vapor del agua caliente golpeó mi cuerpo rápidamente.

Allí estaba ella, dejando que las gotas de agua reposaran sobre su delicada silueta. Sin dejar nada a la imaginación, su cabello mojado se aferraba su rostro fuertemente a la vez que mantenía los ojos cerrados.

Luego de unos segundos observándola decidí entrar. Ella no tardó en sujetar mi mano y guiarme hasta el sitio bajo la ducha, el agua estaba demasiado caliente pero no dije nada, aunque me incendiara por dentro. Cerré con fuerza los ojos mientras ella recorría mis curvas con ambas manos, pegando su cuerpo ligeramente al mío. Suspiré dispuesta a rendirme, no podía soportar la tentación.

Cuando di media vuelta reclamó mis labios colocándome contra la pared, las gotas se deslizaban entre nosotras formando parte de los besos. Podía sentir como su lengua buscaba ansiosa la mía, el ritmo aumentaba rápidamente llevándome a desear el control.

Tomando su cintura invertí las posiciones dejándola a ella reposando contra los azulejos cubiertos de vapor, con desesperación guíe mi mano hacia sus pechos masajeando cada uno, al mismo tiempo que movía una de mis piernas para colocarla entre las suyas, no hacía falta levantarla gracias a la diferencia de estaturas. Mi muslo presionaba su intimidad cada vez con más fuerzas.

—¡Ah Jimin! —aparté mi rostro observando como llevaba su cabeza hacia atrás con los ojos cerrados, me encantaba verla de esa forma.

Con suavidad reposé mis labios sobre su cuello sintiendo como mi animal interior gritaba que atravesara su piel y la marcara, despegué mi húmeda pierna de su zona, llevando mi mano hasta allí, acaricié su clítoris con lentitud, yendo más abajo para lubricaba mis dedos.