Capitulo 22

8 0 0
                                    

El tiempo paso muy rápido, termine la asignatura que Eliot dictaba, seguíamos topandonos en el campus de vez en cuando.

Al salir del campus regresábamos juntos a casa, Eliot organizo un estudio para mi en una de las habitaciones del apartamento, Lu y Julia venian de visita con frecuencia.

Nosotros íbamos seguido a casa de Alice, desde que la conocí se mostró amable conmigo y con el tiempo comenzamos a compartir tiempo juntas.

Aun no conocía a Daniel el padre de Eliot, se había divorciado de Elise la mamá de Elliot cuando él era adolescente, sé que no me lo había presentado aún porque no tenian una buena relación y además porque era muy amigo del director Vernon y eso podría ser un problema.

Esas navidades las pasamos en la cabaña de Eliot junto con Alice, mis padres, Lu y Max, quienes habían comenzado a salir también.

En un abrir y cerrar de ojos había pasado un año, uno maravilloso!

El hombre que dormía a mi lado me había cambiado la vida, pero amaba cada instante a su lado, la devoción con la que me miraba, la forma en que hacía especial cada momento...

Habíamos planeado escaparnos ese fin de semana a Canon Beach, una playa que no estaba tan lejos de nuestra ciudad, para celebrar nuestro aniversario, sería un fin de semana para los dos, algo muy romántico.

Cuando llegamos el viernes en la tarde al hotel nuestra habitación había sido decorada con pétalos de rosa y nos esperaban con champagne, era un deleite!

-Cambiemonos a algo más apropiado para la cena- sugirió él, al tiempo que me daba una nalgada juguetona

Di un respingo en reacción y corrí a alistarme, escogí un vestido blanco, largo y con una apertura pronunciada en la pierna, muy lindo y sexy, sin dejar de ser elegante.

Cuando me miraba al espejo Eliot se acerco por detrás y con sus manos pasa por mí cuello un delicado collar dorado con un colgante de diamante en forma de corazón.

-Perfecta- dice mientras abrochaba el collar y me daba un beso en el hombro.

-Es precioso Eliot, gracias- conteste dándome vuelta y besándolo con ternura.

Salimos de la mano rumbo al restaurante donde habíamos reservado, todo era perfecto... El lugar, la música, el ambiente, la compañía... TODO!

Hasta que la vi! De todos los lugares en el mundo justo tenía que encontrarla en ese preciso lugar y momento!

-Elliot que sorpresa encontrarte aquí - soltó la mujer mientras me veía con desprecio y saludaba a Elliot con un descarado beso demasiado cerca de la boca.

Era Maitte Vernon, nuevamente la rubia alta y del cuerpazo estaba frente a mí, de inmediato mi humor cambió y a mi mente volvió el beso que le había dado a Eliot.

Me removí incomoda en mi silla.

-Maitte, recuerdas a Ana?- preguntó Eliot

-Mmmm no creo- respondió ella inspeccionandome

-Es mi novia- dijo Eliot con orgullo

-Mucho gusto- le dije con un tono bastante irónico

-Tu novia? - preguntó ella ignorandome

-Si- conteste - gustas sentarte con nosotros? Estamos en medio de una celebración - continúe ofreciéndole una sonrisa hipócrita

-que celebran? - preguntó arqueado una ceja

-Nuestro aniversario- respondimos al tiempo Eliot y yo

-Ya veo, los dejo celebrar entonces- soltó algo irritada para luego dar media vuelta e irse.

Aunque ya no estaba, había logrado incomodarme y es que no toleraba la forma en que se comportaba esa mujer, Eliot lo notó así que intentó distraerme hablando de otras cosas y funcionó.

La cena había acabado, así que fui al tocador un momento. Cuando salía del baño la rubia estaba en el lavado también y con voz fría dijo:

-Disfruta el tiempo con Eliot, él es mío y siempre será así, me ama-

-Si es así ¿por qué está aquí conmigo y no contigo? - respondí con audacia

-Porque aún no esta preparado para sentar cabeza y yo tampoco, pero que te quede claro niñita, eres un pasatiempo para él- dijo caminando bruscamente hacia mí y chocando con mi hombro para salir del tocador

Momentos después salí de ahí también y la vi en nuestra mesa acariciando el brazo de Eliot, los ojos de la rubia se encontraron con los míos mientras yo me acercaba a la mesa, cuando estuve lo bastante cerca ella le dijo:

-Recuerda querido, eres mio- se dio la vuelta y se fue del lugar, al mismo tiempo que yo llegaba.

-¿Qué fue eso? - le pregunté a Eliot claramente disgustada

-Nada cariño, no le prestes atención - trato de tranquilizarme

La verdad yo estaba furiosa ¿que se cree esa mujer? Pensaba yo!

El encuentro con esa mujer arruinó el buen ánimo que traía y aunque Eliot trataba de distraerme con un paseo por la playa, lo cierto es que él también parecía afectado así que dimos por terminada la noche y nos retiramos a nuestra recamara.

Entre a la bañera qué había preparado tratando de mejorar mi humor, al rato Eliot se acercó con dos copas en la mano y me ofreció una al tiempo que me quitaba la esponja qué tenía en mi mano.

-Puedo? - preguntó

Yo acentí

Se sentó en la orilla de la bañera y comenzó a pasar la esponja por mis brazos, luego por mi espalda.

Bebí la champaña qué me había traído, mientras sus manos acariciaban mi cuerpo desnudo

Deje a un lado la copa y tome el torso del hombre acercandolo, cuando lo tuve lo suficientemente cerca lo bese

-quieres entrar? - lo invité

Se quito la ropa de inmediato y entró a la bañera acomodandose detrás de mi, pose mi espalda en su pecho, mientras sus manos seguían acariciandome

-Te amo- dije relajada sobre él
Su mano tomo mi cara y la giro para que lo vea
-Repitelo- ordenó
-Te amo - obedecí

El tomo mis labios con ímpetu, su lengua había invadido en mi boca y sus manos se aferraba a mi cuerpo con hambre.

-Salgamos de aquí - sugirió  y yo lo seguí

Seguimos besándonos sin separarnos un centímetro, el tomo mis piernas obligándome a enroscarlas a la altura de sus caderas y camino hasta el mueble del lavabo donde me dejo sentada.

Sentía a mi sexo palpitar ante la anticipación y el roce de su miembro, hasta que lo empujó en mi interior, con embates fuertes, qué liberaba corrientes sobre todo mi cuerpo... El ritmo que llevaba me arrancaba gritos de placer qué no podía contener, mis uñas se enterraban en su piel tratando de mantener un agarre firme

-Dilo de nuevo nena- me pidio
-Te amo - dije viéndolo a los ojos

Otra estocada fuerte me golpeó obligándome a cerrar los ojos

-Mirame- ordenó - dilo-

-Te amo- repetí abriendolos

Sus embestidas iban más y más rápido, sus ojos no se despegaba de los mios

-Eliot- gemí cuando sentía que el orgasmo se acercaba

-Te amo- solté llegando al climax mientras el también lo hacía

Me sujeto de las caderas y conmigo en brazos nos llevó hasta la cama, donde repetimos el encuentro y luego entre besos también me dijo que me amaba.

Diario de una confesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora