𝑩𝑼𝑮𝑨𝑴𝑩𝑰𝑳𝑰𝑨 || 𝗕𝗮𝗻𝗴 𝗖𝗵𝗮𝗻

𝐗𝐗𝐈𝐗

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2022, Estados Unidos.

— ¡Lizzie, por acá! —Llama Allyson a la vez que levanta su mano para dar a conocer mejor su ubicación. Lizzie al verla sonríe, levanta su mano para saludarla y se encamina a su encuentro.

Llevaban una semana desde que la teclista debutó en el escenario del distrito teatral, no había día en que las chicas no estuvieran juntas; cuando no estaban en ensayo estaban de compras por la gran manzana, ya en el teatro, al compartir camerino se peinaban y maquillaban la una a la otra, ayudándose también con el vestuario y a repasar las canciones en las que participaban, ya después de las funciones la actriz acompañaba a Lizzie a dar un par de autógrafos a los fans que iban a la obra para luego tomar el mismo taxi el cual las dejaría en sus respectivos destinos.

Si bien, su amistad comenzó en el par de ensayos a los que la artista pudo ir de forma presencial, esta ahora se afianzó con la presencia recurrente de la castaña en el teatro, sumándole los intereses en común que Ally había descubierto la primera noche.

Por lo que ahora se encontraban en una cafetería, que estaba cerca de la quinta avenida, para merendar antes de ir al ensayo de ese día.

—Lamento la tardanza, estaba en una videollamada con un amigo y se me pasó el tiempo —. Se disculpa la morena.

—Oh, no te preocupes —. Le resta importancia haciendo un gesto con la mano para luego beber de su café. — Espero que no te importe, pero te pedí un latte, siempre lo pides cuando salimos asique asumí que esta vez no sería diferente, además de un pedazo de tarta de manzana.

— ¿Dónde estuviste toda mi vida? —Bromea Lizzie.

La actriz se ríe por las ocurrencias de la chica, por lo que no puede evitar reír, alegre por haber acertado en el pedido.

—Eres graciosa, por eso me caes bien.

—Creí que te caía bien porque soy la única de tus amigas con la que puedas hablar de kpop.

—Bueno, eso también.

Ambas se sonríen, se sentían a gusto en compañía de la otra, es entonces cuando Lizzie recuerda algo.

—Oye, Ally.

—Dime.

— ¿Nunca te han dicho que te pareces a Sana?

Allyson se asombra ante esto, nunca le habían dicho algo así. — ¿Sana de Twice? Pues no, ¿tú crees que me parezco?

—Tienes un aire a ella, no lo sé —la mira con detenimiento—, sus rostros son bastante similares.

—Woow, nunca me lo habían dicho —. Sus mejillas se ruborizan un poco y sus ojos brillan. —Creo que es el mayor alago que he recibido —. Ríe avergonzada. —De cualquier manera, yo también soy japonesa, o bueno, mis padres lo son.

Lizzie ríe por lo tierna que le resultó su reacción. Continuaron hablando de temas triviales mientras hacían la hora para ir al teatro, ese día practicarían la armonización como grupo además de uno de los números con el que estaban teniendo un par de problemas desde hace dos noches.

Ya terminados sus cafés y pasteles emprendieron camino al distrito teatral por la séptima avenida. Al ser Marzo el frío de NY les calaba por los huesos en las zonas que no estaban tan cubiertas, el viento helado soplaba de vez en cuando y las calles estaban mojadas por la nieve que hubo hace unos días, a pesar de todo eso, el cielo se encontraba despejado con un par de nubes moviéndose por la troposfera. Se veía precioso.

El par de amigas caminaban tomadas del brazo para así conservar mejor el calor.

—Lizzie, tengo una pregunta.