En una época antigua y tumultuosa, cuando los clanes Uchiha y Senju se encontraban enfrascados en una brutal guerra, surge una historia de amistad inesperada entre dos niños destinados a ser enemigos. Hikari Uchiha, la hija del líder del clan Uchiha...
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@mananeez
La luz de la luna se filtraba por las ventanas de la casa, iluminando suavemente la estancia donde Madara y Hikari se encontraban. Después de la revelación del embarazo de Hikari, el ambiente parecía haberse relajado un poco. Madara, con gesto reflexivo, se sentó en el sofá mientras Hikari permanecía de pie frente a él, observándolo con atención.
— Hermana. — comenzó Madara con voz más serena que antes, — sé que nuestras diferencias son muchas y profundas, pero... esta noticia... — Sus palabras parecían vacilantes, como si no estuviera seguro de cómo expresar lo que sentía.
Hikari se acercó lentamente y tomó asiento a su lado, ofreciéndole una sonrisa tranquilizadora.
— Lo sé, Madara. Pero esta nueva vida que viene... debería darnos una oportunidad para dejar atrás las disputas del pasado y unirnos como familia.
Madara la miró fijamente por un momento, como si estuviera procesando sus palabras. Finalmente, asintió con la cabeza, reconociendo la verdad en ellas.
El ambiente tenso que había dominado la habitación comenzó a disiparse, dejando paso a un sentimiento de renovada esperanza y reconciliación entre los hermanos. A medida que la noche avanzaba, sus conversaciones se volvieron más amenas y, por primera vez en mucho tiempo, compartieron momentos de calma y comprensión mutua.
La noche avanzaba con serenidad, envolviendo la casa en una atmósfera de calma y tranquilidad. Hikari se recostó en su cama, con la mente llena de pensamientos sobre el futuro y las reacciones que vendrían. A pesar de la paz que reinaba en su hogar después de la conversación con Madara, una ligera inquietud persistía en su interior, alimentada por la incertidumbre sobre cómo recibiría Tobirama la noticia de su embarazo.
Con un suspiro, Hikari se acomodó entre las sábanas, deseando que Tobirama estuviera a su lado en ese momento para compartir con él la emoción y el temor que la invadían. Se preguntaba cómo reaccionaría él, si se sentiría feliz, sorprendido o abrumado por la responsabilidad que les esperaba.
El tic tac del reloj resonaba en la habitación, marcando el paso del tiempo mientras Hikari luchaba por mantener la calma. Sabía que no podía evitar el enfrentamiento con Tobirama por mucho más tiempo, pero temía cómo sería recibida la noticia.
Finalmente, el cansancio comenzó a apoderarse de ella, y sus pensamientos se desvanecieron lentamente mientras se sumía en un sueño inquieto, esperando que el nuevo día trajera consigo respuestas y tal vez, un poco más de claridad sobre lo que les deparaba el futuro.
Hikari se levantó temprano, determinada a enfrentar el nuevo día con la misma valentía que siempre había demostrado. Sin embargo, la noticia del embarazo aún resonaba en su mente, llenándola de una mezcla de emociones que la hacían sentirse ansiosa e insegura. Se preparó con cuidado, vistiendo su uniforme de líder uchiha con la esperanza de encontrar fuerzas en su rol como protectora de su clan y de la aldea.
