Lavender Haze (+18)

4.8K 196 16
                                    

Pov Chiara.

-¿Que has hecho Kiki?- preguntó en un susurro con gesto de dolor.

Intenté explicarme.

No era lo que parecía, pero sólo conseguía hilar una serie de tartamudeos inconexos que consiguieron poner nerviosa a Violeta.

-Ven conmigo- y sin decir nada más, tomó mi mano para arrastrarme a trompicones escaleras arriba- ¿Me puedes explicar como es posible que en los diez minutos que te dejo sóla, te encuentro saliendo del armario con la misma chica que te besó hace unos meses?- bramó cruzándose de brazos y me hice pequeñita al dejar de notar aquella mirada cálida de siempre.

-No es lo que parece- logré pronunciar intentando acercar posiciones pero Violeta dio un paso atrás evitando el contacto. Y aquello fue como un puñetazo en el estómago. Nunca me había rechazado y dolía... joder que si dolía.

-¿A no?... pues yo creo que es exactamente lo que parece- y levantó una mano para que me detuviera en mi último intento por tocarla.

Entrelacé mis manos tras la espalda intentando respetar su silenciosa petición.

-A ver...- froté mis sienes tratando de buscar una claridad que ahora mismo no tenía, antes de volver a la posición de antes- cuando te fuiste a fumar, estos propusieron jugar a verdad o reto y cuando me tocó a mi, elegí reto- como me arrepentía de no haber escogido verdad, pero tenía miedo de que me preguntarán algo relacionado con Violeta y no ser capaz de mentir- y entonces Salma se ofreció voluntaria para proponerme un reto- valiente hija de puta la otra, desde ese momento supe que iba a salir mal- y me dijo que me metiera siete minutos en el armario con Julieta.

-¿Has hecho algo con ella?- preguntó sin abandonar su rostro serio. Y entonces tragué saliva con fuerza.

-Ella... ella me besó- con la última palabra Violeta dejó caer sus brazos a ambos lados de su cuerpo en un gesto derrotado y la chispa de dolor que vi en sus ojos me dolió más que nada.

-¿Por qué me haces esto?- su voz se rompió haciendo que quisiera abrazarla con todas mis fuerzas.

-Vio te juro que en cuanto me di cuenta de lo que estaba pasando la aparté, me pillo de improviso- reconocí con sinceridad esperando que me creyera.

-Y después de eso decidiste que era una gran idea seguir más tiempo encerrada con ella... Yo es que flipo de verdad- chasqueó la lengua al tiempo que me daba la espalda.

Corrí a ponerme en su campo de visión y la agarré de los hombros para que me mirara. Que no intentara apartarme de un manotazo fue una victoria.

-Pero sólo porque le quise dejar las cosas claras- y era verdad, sin exponer mi relación con Violeta, le había explicado que no estaba interesada en ella y Julieta lo aceptó con deportividad y humor- Venga Vio, no es para tanto... - Y en qué hora se me ocurrió pronunciar aquellas palabras... me arrepentí al instante.

Su mirada se oscureció, pero no de la forma que tanto me gustaba, si no que era pura rabia lo que enseñaba. Se revolvió bajo mi agarre y cuando vio que no la soltaba, me apartó las manos de un manotazo.

-Ni se te ocurra invalidar mis sentimientos Chiara Oliver- masculló apretando los dientes.

-Perdona Vio, pero de verdad, es sólo un juego- me estaba agobiando no ser capaz de reconciliarme con ella, y eso provocaba que no escogiera las mejores palabras.

-Será un juego para ti no te jode- hincó un dedo en mi hombro enfatizando sus palabras.

-Venga Vio ya sabes que no me he expresado b...- me cortó.

SUSURROS EN EL ALMA // KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora