Issue [Problemas #2]✔️

Capítulo 34

"Lo aprendí de ti"

Amy

¿Dónde demonios estaba Logan cuando se le necesitaba?

Dijo que se encargaría de que su madre no se acercara a Suelym, pero había desaparecido hacía veinte minutos y Annabelle estaba aprovechando su ausencia. Tragué en seco cuando la vi tomar el brazo de Suelym para impedir que se fuera, sabía que mi amiga no formaría un escándalo en la boda de su hermana, así que mientras alguien no interviniera Suelym no tenía forma de escapar sin llamar la atención.

Yo estaba solucionando una emergencia con el catering que, de alguna estúpida e inexplicable manera, había añadido cóctel de camarones al menú, cuando Kristal era alérgica y Brandom los detestaba. No podía arriesgarme a irme sin verificar que cada maldito marisco fue removido, y además tenía q echarle un ojo a Audrey que moría de ganas de darle una probada al pastel. Me vi obligada a tomar a Jeremy del brazo cuando pasó a mi lado, empujándolo bruscamente para que se detuviera y me prestara atención.

—Necesito que vayas con Suelym —dije al instante en que volteó hacia mí.

Jeremy arqueó una ceja, dándose un minuto para procesar mi petición. Giró el rostro hacia donde se encontraba la castaña, que todavía escuchaba a Annabelle mientras le dedicaba miradas cargadas de resentimiento y hastío.

—¿Qué está pasando, A? —preguntó, volviéndose hacia mí— No soy tonto, algo pasó el día del ensayo y nunca me dijeron. Me han dejado fuera de muchas cosas, pero estoy hartándome de eso. Me preocupas, y me preocupa Suelym.

—Jeremy, solo ve allí, por favor. Acompáñala hasta que Roy vuelva.

—No hasta que me digas qué ocurre —exigió.

Solté un suspiro. Odiaba lo terco que Jeremy podía llegar a ser. Tenía razón, lo habíamos dejado fuera de mucho, en parte para protegerlo, en parte porque de cierta forma él mismo se había excluido con el pasar de los años. No me correspondía a mí decidir si tenía o no derecho a saber sobre los problemas personales de Suelym, Logan y Kristal; pero se preocupaba por ellos, y realmente necesitaba de su ayuda en ese momento.

—Annabelle es la madre de Suelym —murmuré, cuidando de que nadie más escuchara. Jeremy dio un paso atrás, frunciendo el ceño hasta que una profunda arruga se formó en su frente—, es una larga historia, Jer. Darío le mintió, su madre no murió en el parto, en realidad los abandonó porque ya tenía una familia.

—¿Por eso el alboroto cuando la conoció? —preguntó, aunque sabía que ya había atado todos los cabos en su cabeza.

—No puedo decirte más, ¿ok? Son asuntos de Suelym, pero ella no quiere tener nada que ver con Annabelle, así que por favor solo ve allí y sácala antes de que la maldita mujer le siga hablando.

Jer asintió. Sin decir nada, caminó a zancadas entre los invitados hasta llegar a Suelym y Annabelle. Colocó su mano en la cintura de la castaña, luciendo como si casualmente se uniera a la conversación, con una ligera sonrisa colgándose de sus labios. A veces olvidaba lo bueno que podía resultar actuando. No podía escuchar lo que hablaban, pero algunas pocas palabras fueron suficientes para que Annabelle se alejara y Suelym al fin pudiera relajarse. Alcancé a ver el brillo agradecido en sus ojos al mirar a Jeremy mientras se retiraban a una esquina. No necesitaba estar presente para saber que Jeremy estaba pidiendo ser informado de la situación.

Volví a mis asuntos, asegurándome de que todo estuviera perfecto mientras mantenía un ojo en los invitados, aunque perdí el enfoque cuando Logan entró en el lugar y, algunos segundos luego, los recién casados hicieron su entrada triunfal tomados de la mano y siendo recibidos por una ola de vítores y aplausos. Kristal estaba resplandeciente, aún ataviada en su vestido blanco, mientras Brandom no podía borrar la sonrisa de su rostro cada que miraba a su esposa. Todos se pusieron de pie a medida que ambos hacían su camino hasta su mesa, ubicada en una pequeña plataforma al final del lugar, justo en frente de la improvisada pista de baile. Una vez sentados, la celebración comenzó.