Siempre en mi memoria (Liu, Jeff y tu)

Capítulo 53

*Pov narrador externo*

La promesa de los considerados lunáticos del bosque se cumplió: No los volverían a ver. Y en efecto, pasó alrededor de un mes sin tener ningún avistamiento o noticia sobre ellos. Era una sensación de tranquilidad y a la vez de alerta constante para la joven y los hermanos Woods. No obstante, el terror y la incertidumbre les acechaba a cada rato, por lo que se mantuvieron los tres bastante unidos en un inicio. 

Jeff y Liu salieron a cazar sin alejarse apenas de la cabaña. Atentos miraban a su alrededor en busca de alguna presa. 

El pelinegro traga saliva de forma pesada, tal vez no sea el mejor momento, pero tras la mejora de su relación con él, siente que no puede seguir guardando el secreto. El secreto que sabe que puede tirar todo por la borda. Haberse enamorado ambos de la misma chica podría abrir una enorme brecha en la relación que por fin habían vuelto a construir, pero no podía ocultarlo para siempre. 

—Liu... —Vacila por un instante. Sus pisadas van un par de pasos por detrás del pelicastaño. —Acerca de _____ y yo... —Antes de acabar la frase, es interrumpido.

—No lo digas. No quiero escucharlo, y sé exactamente que ibas a decir. Así que, ahórratelo. —Responde algo tajante, sin mirarle mientras sigue avanzando por el bosque.

—¿Cómo estás tan seguro de lo que iba a decir? —Cuestiona Jeff con el ceño fruncido, algo molesto por no dejarle siquiera haber dicho nada.

—¿Qué ibas a decirme? ¿Qué estáis juntos? ¿Qué os queréis? —Frena en seco, y por fin se gira, quedando cara a cara con Jeff. —¿Qué os habéis besado? O tal vez... ¿Qué os habéis acostado? —Inquiere mientras avanza un paso más hacia él, rompiendo casi toda distancia entre sí.

El silencio del ojiazul le confirma todo sin necesidad de abrir la boca. 

—¿Cómo? —Es lo único que consigue formular el pelinegro, aún desconcertado.

—Las paredes son finas, y las miradas fáciles de descifrar. —Su semblante es serio, pero no se muestra enfadado. —A pesar de todo, no me importa. 

El cuerpo de Jeff se relaja rápidamente y esboza una sonrisa tranquilizadora.

—Eso significa que aceptas... —Una vez más, vuelve a ser interrumpido.

—No me malinterpretes. No me importa lo que haya ocurrido entre vosotros. Yo estuve en el mismo lugar que tú y pienso volver a recuperarlo. —Sentencia Liu con la cabeza bien alta.

Los labios del pelinegro se vuelven una fina línea mientras trata de amarrar su lengua, acallando cualquier mal pensamiento y decirlo sin filtro.

Liu se gira y vuelve a poner cierta distancia entre ellos mientras camina.

—Aún así, no te odio. —Murmura el ojiverde.

Jeff alza las cejas, sorprendido.

—¿De verdad? —Pregunta tratando de ocultar la esperanza en sus palabras, dando zancadas rápidas hasta ponerse junto a él.

Liu asiente, sereno.

—¿Quieres compartir? Las relaciones poliamorosas están muy de moda hoy en día. —Bromea Jeff con una sonrisa llena de burla.

—No hagas que me arrepienta de no odiarte. —Le mira de reojo. —¿Qué tal si me tomo la propuesta en serio? 

—No soy celoso, ¿Qué hay de ti?

—Tampoco lo soy. —Responde.

—Mentiroso.

—Lo mismo digo.