Después de pasar desapercibida por el salón donde las ancianitas se divertían, volví a subir yo sola.
El idiota ni siquiera se había dignado a ayudarme.
Al llegar al desván, le veo mirando por la ventana. Frunzo el ceño al verle tan concentrado. ¿En qué pensará?
-Ya tengo todo.- Digo consiguiendo que se sobresalte y se gire hacia mí mientras sale de sus pensamientos.
No estaría pensando en tirarse por ahí, ¿verdad? Quiero decir, no es que me preocupe, es sólo...
¿¡A quién quiero engañar!? ¡Pues claro que me preocupo por él! ¡No puedo evitarlo! Bien, bien, ya lo he confesado.
Estoy bien.
-De acuerdo. Vamos a empezar.- Después de dudar un segundo, finalmente añade:- Puede que haya tormenta.
Me río y observo por la ventana feliz. Siempre me han gustado las tormentas. Me relajan y, sinceramente, me ayudan a dormir.
-¿Y qué? ¿Acaso tienes miedo?- Pregunto soltando una carcajada. Me parece imposible que un chico tan grande y genial como Jon pueda tener miedo.
Pero entonces... ¿Por qué, cuando lo menciono, se da la vuelta con expresión seria y comienza a limpiar?
-No...- Digo alargando la "o" y aguantando la risa.- ¿El chico perfecto tiene miedo de una pequeña tormenta?
Hago un ruido intentando mantener las carcajadas para mí misma. ¡No me lo puedo creer! ¿Qué pasaría con su estúpida reputación si le dijera a todos que el rey zángano del instituto tiene miedo a una bonita y enigmática tormenta?
Aunque... Puede que las chicas pensaran que es mono y comenzarían a tirársele encima.
Sí, pensándolo bien... No es una buena idea.
Jon me fulmina con la mirada aunque, cuando una luz entra desde la ventana, da un bote mientras su rostro se vuelve pálido. No puedo evitar reír.
-¡Sólo ha sido un relámpago!- Grito doblándome de la risa.
-No tiene gracia.- Me dice enfadado. Se acerca a mí y se cruza de brazos. Me da un poco de pena; yo quería que me abrazara de nuevo. Digo... ¡No! ¿¡Por qué querría eso!?- ¿Tú no tienes miedo de nada?
Durante unos segundos, pongo una cara pensativa. ¿Hay algo que me da miedo? Si es así... no lo recuerdo.
Dibujo una sonrisa con mis labios.
-No.- De repente, una idea llega a mi mente y abro la boca soltando un pequeño jadeo.- ¡Espera! ¡Sí! De mi madre cuando se enfada.
Eso cuenta... ¿Verdad?
Su ceño fruncido se profundiza.
-Ja, ja.- Dice sarcásticamente. Después, me mira de una forma rara.- Eso no es verdad, te doy miedo yo.
Es mi turno de mostrarme cabreada.
-No.
-Sí.- Dice él con una sonrisa.
-No.
Está a punto de hablar de nuevo cuando un ruido retumba en toda la habitación. Un trueno. Entonces, otro sonido inunda el espacio.
El grito de Jon.
Y después de eso, noto que me abraza con fuerza escondiendo su cara en mi cuello.
¡Es tan mono!
Ugh. No, Mac, resiste. No seas como las demás.
Pero... decido abrazarlo al ver que empieza a temblar. Cuando, después de un minuto, sigue de la misma manera, empiezo a preocuparme.
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¡My English Best Friend Es Hipster!
HumorBienvenidos al mundo de Mackenzie ("Mac" para los amigos) y a la manera en la que va a resultar mi vida ahora: En primer lugar, mis padres se separan por una infidelidad entre ellos. ¿Lo siguiente que es horrorosamente horrible? Tengo que vivir con...