Volumen 5: Feral Acto único

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La información de ese hombre salto a su mente en pocas fracciones de segundo, pero, antes de siquiera saber lo que había pasado, la cabeza de la joven es arrancada de su cuello, mientras su cuerpo empieza a ser partido en piezas.

La energía que le restaba a Erse no sería ni de lejos suficiente como para reincorporarse de ese ataque, tristemente, aquel constructo no había hecho más que empezar.

Con un gesto, el cuerpo de Erse poco a poco empezó a disiparse en partículas pequeñas, generando dolor en la joven, no obstante, más allá del dolor lo realmente inquietante era que dicha acción había empezado a consumir su energía.

El espejismo de Diavolo no era como los otros quienes solo se limitaron a hacerle daño, su intención claramente era hacerle fallar, mientras ella no pudiese hacer nada al respecto.

En su mente la joven suplicaba por que se detuviera, lamentablemente incluso si pudiese escucharla nunca lo haría, mientras que poco a poco su llama empieza a consumirse, hasta volverse tan pequeña y tenue como una vela.

Durante mucho tiempo Erse sintió rabia hacia los Milfiore, no obstante, no fue sino hasta este momento que ella recordó con claridad lo mismo que sintió cuando vio a su aldea ser quemada, a su madre morir y a su hermana ser cazada como un animal.

Ella se comprometió a acabar con los Milfiore, pero ahora, finalmente se había dado cuenta que dicha hazaña es imposible, un sueño, una falacia una fantasía.

—Solo soy... una ridícula...

Tras esas palabras, la tenue llama de la joven se apaga y la oscuridad cae a su alrededor...

Simultáneamente...

Fuera del espejismo Wilhelm inspecciona el estado del cuerpo de la joven, al tiempo que Iván llega al lugar tras terminar con la invasión de los caballeros, no obstante, al ver el estado de Erse este no puede evitar alarmarse.

—Wilhelm, ¿Qué esta pasando? — pregunta Iván con un rostro hostil, mientras ve como de los ojos nariz y boca de Erse escurre una sustancia similar a sangre negra.

—Tranquilo, esto es totalmente natural, ¿probablemente? —Señala el hombre.

—¿Probablemente...?

—El proceso de tribulación es diferente para cada persona, el hecho que sangre es algo bueno, esta eliminando menudencias para dar lugar a su nueva sangre, aunque, ella realmente a soltado mucha... mucha sangre...

Con esas palabras Iván no puede evitar ver la suela de sus zapatos evidenciado que la tierra alrededor de Erse estaba humedecida con sangre como si de un pantano pequeño se tratase.

—La tribulación suele durar el tiempo en que a una persona le tome digerir la comida por completo, entre 16 a 24 horas, así que lo más seguro es que despierte pronto —Clama el hombre.

—¿Y cuanto tiempo lleva en ese estado? —pregunta Iván.

—Unas 22 horas...

Al tiempo que Wilhelm e Iván discuten a un lado de Erse se logra visualizar el cuerpo de Natasha quien en estos momentos se encontraba consciente de todo lo que estaba pasando.

—"Ese joven, también expide el mismo tipo de energía de Wilhelm" —Medita internamente —"Esto no es bueno, este mundo ya ha sufrido demasiado con un monstruo como el, si nacen dos más..."

Antes de poder concertar su idea, la mujer nota como Iván le observa directamente con una mirada fría, algo que le hizo palidecer.

—Por cierto, ¿Por qué ella sigue viva? —Pregunta Iván.

El presagio de las flores (Hana no Zenchō)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora