I WANT MORE (TERMINADA)

Capítulo 40

Estamos en el coche y no tengo ni idea de a donde vamos. Durante la cena Matt a estado muy evasivo y creo que es por lo de Austin. Me ha dicho que si vuelve a oírlo llamarme amor, lo matará. Lo miro y tiene el ceño fruncido.

- Oye. - Le acaricio el brazo y me mira. - ¿Qué te pasa?

- Estoy preocupado por la pelea.

- ¿Por qué? Ganarás y de sobras.

- No me preocupa eso. Me preocupa que te pase algo a ti. - Lo miro con ternura y le acaricio la nuca.

- No me pasará nada Matt. - Se ríe.

- Nunca has estado en una de esas peleas. Le gente se vuelve literalmente loca. Empujan, se pegan, van drogados y bebidos. Es peligroso.

- Me da igual. Voy por ti. - Sonríe y asiente con la cabeza.

- Lo sé. Y por eso he llamado a mi hermano y a David.

- ¿Conoceré a tu hermano?

- Si. - Me mira arqueando una ceja. - ¿Por qué lo preguntas si ya sabes la respuesta?

- Porque es muy temprano aún. - Menea la cabeza divertido.

- Ya hemos llegado. - Aparca el coche y nos bajamos. - Ven. - Me tiende la mano y nos metemos por un callejón. Hay cinco personas paradas en la oscuridad. Le aprieto la mano a Matt, pero sigue andando.

- Matt. - Reconozco la voz.

- Martin. - Me suelta la mano y estrecha la mano de este. Se encienden un par de farolas. Martin me mira y me sonríe con dulzura. David está hablando con un hombre que se parece bastante a Matt. Debe de ser su hermano. - Dan, ven. - El chico se gira y viene con David hacia nosotros.

- Supongo que tu debes de ser Judith.

- La misma. - Le tiendo la mano y me la estrecha.

- A David y Jack ya los conoces. Y este negro cabron de aquí. - Le rodea el hombro con el brazo y los dos ríen. - Es Drake.

- Encantada. - Me sonríe y le devuelvo la sonrisa.

- Bien. Quedaos con Judith en todo momento, ya sabéis la mierda que hay ahí dentro. - Todos asienten. - Vamos.

Martin abre una puerta y del interior se oyen gritos. Drake pasa el primero y Matt lo sigue arrastrándome a dentro con él. Estamos todos en una habitación pequeña y los gritos cada vez son mas fuertes.

- Judith mírame. - Me giro y clavo mis ojos en los suyos. - No te separes de Dan, por favor. - Asiento y me coge la cara entre las manos. Apoya su frente a la mia. - Si te pasase algo no me lo perdonaría jamás.

- Eh. - Le levanto la cabeza con ternura. - Estaré bien. Tengo más guardaespaldas que Beyonce, tú solo preocupate de ganar.

- Te quiero.

- Te quiero. - Sonríe y me da un pequeño pero intenso beso.

- Matt, fuera la camiseta y ponte los guantes. Tienes que salir en un minuto.

- De acuerdo. - Se separa de mi. - Largaos ya y que no le pase nada, u os juro que os mataré uno a uno.

Todos asienten. Dan me ofrece su mano y la cojo un poco vacilante. Salimos por una puerta bastante pequeña y al entrar al interior, la mandíbula se me descoloca. Hay demasiada gente en un espacio no muy grande. En medio de la sala hay un ring. Nos empezamos a mover entre la multitud hasta estar todos más cerca del cuadrilátero. Empiezo a contar las salidas que hay. Solo hay dos. Demasiada gente. Miro a mi alrededor y hay cada personaje... Un fuerte pitido resuena por la sala haciendo que la gente chille aún más.