I WANT MORE (TERMINADA)

Capítulo 13

Ya no noto los pies y no encontramos a Kylie por ninguna parte. Kenzo no me ha soltado la mano en ningún momento y se lo agradezco, porque cómo me suelte, me caeré. Matt y Jack se han ido por el otro lado, les he enseñado una foto de Kylie y si la encuentran nos llamarán. Nos acercamos a los baños y hasta ahora no me había dado cuenta de que me estaba haciendo pis.

- Espérame aquí, ahora vengo. - Kenzo asiente y me meto en el baño. Me miro en el espejo y me alegro de qué el maquillaje siga intacto. Me apoyo contra la pared esperando a qué alguien salga  y me doy cuenta de qué en uno de los compartimentos hay alguien sentado en el suelo. "Porfavor qué no sea Kylie" me repito esa frase una y otra vez mientras me acerco al mugriento compartimento. Abro la puerta lentamente y el alma se me cae al suelo. - ¡KENZO! ¡KENZO POR FAVOR VEN! - Las lágrimas empiezan a caer por mi rostro. Kylie no se mueve. Apoyo mi frente contra la suya y cojo su cara delicadamente. - Por favor, despierta.

- ¡JUDITH!

- ¡Estoy aquí! - Kenzo se acerca corriendo y palidece en el acto. - Dios mío... Apartate. - Me aparto y coge a Kylie con cuidado. - La habrán drogado y por las medias rotas y las bragas en el suel...

- Por favor - lo corto antes de que acabe la frase. - no lo digas. - Me mira con tristeza y compasión y salimos del asqueroso baño. Ya no hay tanta gente, por lo que avanzar entre la multitud no cuesta tanto. Cuándo Matt nos ve, le da un codazo a Jack y van hacia la salida. Al salir a la calle, veo que Jack esta en el BMW de Matt.

- ¿Habéis venido en coche?

- Si, está justo ahí.

- Vale pues, tú vete con Matt en tu coche y Jack y yo vamos en éste. - Matt abre la puerta y Kenzo la deja en el asiento trasero. - No te preocupes, sé pondrá bien. - Quiero llorar. Quiero gritar y entrar ahí y buscar al cabrón qué le ha hecho eso a mi mejor amiga.

- ¿Cual es tu coche?

- El Jeep negro de allí.

- Vale pues dame las llaves. - Lo miro titubeante y le tiendo las llaves. Nos subimos y arranca a toda prisa. Se salta todos los semáforos y aún así me parece que va lento. Cuándo llegamos al hospital, bajo corriendo del coche y Matt me sigue. Entro en urgencias y me acerco a una enfermera.

- Disculpe, han traído a una chica hace nada, se llama Kylie, ¿Dónde está?

- La están atendiendo. Esperen en esa sala por favor. - Matt me coge de la mano y me lleva hasta la sala. Kenzo y Jack se levantan cuándo nos ven entrar.

- ¿Dónde está? - No me permito llorar, pero en cualquier momento se que voy a estallar.

- No lo sé Judith. La he entrado en brazos y me la han arrancado. Se la han llevado a una sala. Vendrán a avisarnos cuando le hayan hecho unas pruebas. No sabemos lo que le han dado. 

No paro de caminar por la sala y me estoy poniendo cada vez más nerviosa. Llevamos más de una hora aquí. Jack se levanta.

- Bueno, yo me tengo que ir. Avisadme si necesitáis algo. - Se acerca a mí y me abraza. No lo conozco de nada, pero le devuelvo el abrazo, ha estado aquí y me ha ayudado con Kylie.

- Gracias por haber venido y haberte quedado un rato. - Me sonríe y se va.

- Judith siéntate. Ya que no te quieres ir por lo menos siéntate. - Levanto la cabeza y miro a los dos. No sé si sentarme al lado de Matt o de Kenzo. Qué demonios, me siento con Kenzo, agradezco lo qué ha hecho Matt, pero sigue siendo un capullo. Cuándo Matt ve que voy a sentarme al lado de su amigo, se cambia de silla dejando una libre en medio de los dos. Lo miro sorprendida y me medio sonríe. Me acomodo en la silla y Kenzo me coge la mano y, para mi sorpresa, Matt hace lo mismo. Cuándo ya son las cinco y media, un hombre alto con bata blanca se acerca.

- ¿Vosotros sois familia o amigos de Kylie?

- Es mi mejor amiga. ¿Qué le ocurre?

- Verás, a tu amiga la han drogado con Diazepam y cloroformo. - Lo miro extrañada. - El Diazepam, es un fármaco que se usa para tratar diferentes estados de ansiedad y otras enfermedades, es un sedante cuyos efectos afectan a neuronas del sistema nervioso principal y en grandes dosis, puede ocasionar hasta el coma. Le hemos hecho un lavado de estómago y estamos haciéndole más pruebas. No sabemos su estado actual, no estamos cien por cien seguros de que despierte ya qué la cantidad de Diazepam qué tenía en el cuerpo era muy alta y que haya aspirado cloroformo no ayuda, además tenía muy alto el nivel de alcohol en sangre. - Las piernas me empiezan a temblar. - No creo que sea conveniente qué le diga esto por el estado de nerviosismo en el qué está, pero debe saberlo. Su amiga ha sido violada, la drogaron para no tener tantas dificultades, solemos ver casos así cada mes. No quiero darle falsas esperanzas, pero tenga fe, haremos todo lo posible para que despierte.

- Gracias doctor, avísenos ante cualquier novedad. - Matt contesta por mí. Me dejo caer de rodillas al suelo y las palabras del doctor no paran de repetirse en mi cabeza, "Su amiga ha sido violada, la drogaron para no tener tantas dificultades", "Puede ocasionar hasta el coma", "No estamos seguros de qué despierte". Me quiero morir, quiero ir a verla, abrazarla y qué esté bien. Tiene que estar bien, sin ella, todo será una mierda, no me puede dejar sola, me mataría... Rompo a llorar y Kenzo me coge en brazos.

- Vamos, te llevamos a casa, tienes que descansar.

- No, no quiero. - Digo entre sollozos.

- Kenzo tiene razón Judith, mañana podemos volver. - Asiento y hundo la cabeza en el cuello de Kenzo. Mis días van de mal en peor, Austin tenía razón, mi pesadilla no ha hecho más que empezar.