Únihumanos

Cap. 2: Miguel

8 horas antes...

Soy Miguel, un chico extraño para muchos, algunos me dicen que soy único otros me dicen que estoy enfermo, no entiendo a las personas.

Sucedió hace 15 años atrás, yo aún era un bebé recién nacido, recuerdo en visiones como estábamos más de 20 bebés en un laboratorio científico, todos nos tenían con unas pulseras de colores distinguiendo nuestros Únipoderes y niveles de peligrosidad.

Nivel 1: Blanco.
Nivel 2: Gris.
Nivel 3: Negro.

Mi conciencia al mundo sucedió normal como cualquier bebé a los 2 o 3 años, pero aún en mis sueños puedo ver como fuimos creados y como nos dieron estos Únipoderes.

(...)
Actualmente.

—Debemos hablar sobre tu Únipoder y sobre como te pude ver— Digo de manera seria.

La chica se queda mirándome con curiosidad y tal vez crea que estoy loco diciendo eso.

—¿Qué es Únipoder?— Pregunta la chica con curiosidad mientras se pone de pie y se aleja un poco de mi.

Al parecer le di miedo o piensa que trato de hacerle algo, no sé, pero me parece curioso que no sepa nada sobre los Únipoderes.

—Únipoder, enserio, ¿no sabes que es un Únipoder? Dime algo, ¿Conoces tu origen?— Muchas preguntas y esperaba las mismas respuestas.

La chica solo me sigue observando con la misma cara que antes, al parecer no confía en mí, bueno es lógico no nos conocemos.

—No te entiendo, ¿A qué te refieres con "orígen"?— Dice moviendo sus manos haciendo la seña de las comillas.

—Demonios, no recuerdas nada, tal vez sea el único— Digo en murmuros intentando no hablar más alto para que no me escuche.

—Únipoder es un ADN evolucionado que llevamos en nuestra sangre, debes de haberlo sentido desde pequeña— Me intento acercar a ella, pero ella se sigue alejando de mi.

—No te conozco, déjame en paz— Dice la chica alejándose de mi corriendo hacia otro rumbo.

Sin más que decir la sigo a paso lento viendo por dónde se va, parecía alguien razonable, pero como veo, tendré que buscarla por otro lado.

Me voy de ahí en cuanto pierdo de vista a la chica, realmente vivimos en la misma colonia, pero se pueden preguntar cómo supe donde vivía, pues es sencillo, uno de mis Únipoderes me permite detectar la ubicación de cada Únihumano y ver qué habilidad extraordinaria tiene.

Al llegar a mi casa entro por la puerta principal (Suena tonto, pero si tenía que serlo) y saludo a mi padre adoptivo.

—Buenas tardes señor Scott, ¿Que tal le fue en su trabajo?— Pregunto arqueando una ceja mirando fijamente al don, el cual se encuentra sentado leyendo un periódico desinteresado en el.

—Buenas tardes Miguel, hay comida en el refrigerador— Dice con su voz grave y trabada.

Abro el refrigerador y agarro 2 sándwiches que me dejaron, los caliento en el microondas y me los como, después me voy a mi cuarto.

Mi cuarto: es un cuarto normal, tiene cama, escritorio con PC, clóset y una ventana donde tengo una maceta con una rosa negra.

Al estar dentro del cuarto me siento en el escritorio y enciendo mi PC para intentar conseguir el Facebook de la chica, parezco un obsesionado, pero solo quiero que descubra quién es en realidad.

Pasaron las horas y no logró encontrar nada, solo supe en qué escuela está por una publicación de un tal José, observo la hora y ya es tarde, me voy a la cama y me duermo.