Starstruck | Kivi

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- Ahora me toca a mí - fue todo lo que dijo Chiara cuando su cuerpo se destensó y recuperó un ritmo de respiración normal tras el orgasmo que Violeta le había provocado.

La morena se abrazó a Violeta e hizo que giraran sobre sí mismas, de modo que la traductora quedara encima. Entrelazó las piernas con las de la otra y colocó unos mechones de pelo de la cantante detrás de las orejas. La miró a los ojos y empezó a acariciar con una delicadeza extrema todas las facciones de su cara.

Violeta vio perfectamente como el fuego con el que Chiara las había girado, dispuesta a comérsela, se había convertido en otra cosa en un momento.

- You are so unreal, Vivi - le susurró Chiara, sin dejar de acariciarle la cara.

Violeta, en respuesta, paseó sus manos por la espalda desnuda de la morena, trazando patrones sin sentido.

- Tenía muchas ganas de follarte hace un segundo, ¿sabes? - siguió hablando la traductora.

- ¿Y ahora ya no? - preguntó Violeta, con un tono algo neutro, preocupada de repente por si alguna alarma se había activado en la mente de Chiara, haciéndole subir la muralla que habían mantenido fuera de juego durante ese día.

- No. Ahora me muero... pero me muero, por hacerte el amor y que entiendas bien todo lo que me haces sentir - le dijo Chiara, mirándola a los ojos con una intensidad que provocó que la emoción se asomara en los ojos de ambas.

- Kiki... - suspiró Violeta, acariciándole el pelo.

- Perdón si acabo de romper lo hot de todo esto... - desvió la mirada Chiara, algo avergonzada.

- No pidas perdón y hazme el amor, si así lo sientes - reafirmó la pelirroja, poniendo el dedo índice en su mentón para que la mirara de nuevo-. A mí me parece perfecto.

Violeta buscó su boca e inició un beso lento, que la morena siguió, entrelazando su lengua con la de la cantante en un baile que no quería que terminara nunca. Chiara dejó otro beso en sus labios, esta vez más corto, antes de empezar a repartirlos por toda su cara.

Y por su cuello. Y por sus hombros y por su pecho. Y acarició sus brazos desnudos de arriba abajo. También los repasó con besos. Y entrelazó las manos de Violeta con las suyas, unión que la pelirroja enfatizó con un apretón y una caricia en el dorso.

Chiara la miró y, al ver el brillo en los ojos de la cantante, tuvo la necesidad imperiosa de deshacer el camino e ir a besarla de nuevo.

Después retomó su viaje por el cuerpo de la otra, dejando besos con una paciencia y un mimo que a Violeta le hizo sentirse literalmente adorada.

- ¿Me vas a besar entera? - preguntó Violeta, cuando la traductora ya bajaba por uno de sus muslos.

- Mm... I think so... Quiero besarte entera. Porque toda tú eres perfecta y toda tú me encantas. Y quiero que lo sientas así.

- Me encanta escuchar eso, Kiki - expresó Violeta, consciente de que nunca la morena había expresado con palabras eso que decía.

- Date la vuelta - murmuró Chiara en voz tan baja, que la cantante, que estaba disfrutando del contacto de sus labios, casi no entendió.

- ¿En serio? - rio Violeta-. Hay un sitio por delante que no has besado...

- Turn around, Vivi, please - insistió la morena, y la otra obedeció.

Chiara besó su cuello por detrás, y continuó, resiguiendo a lametones su columna. Y besó sus caderas y sus nalgas y siguió por sus piernas. No quedó ni un centímetro de piel de la pelirroja que la morena no cubriera de atenciones.