Starstruck | Kivi

37

"Buenos días Kiki"

"Kikiiii! Hola??? ¿Te has quedado dormida? (Ojalá sí)"

"Igual se te ha muerto el móvil?"

"KIKIII ¿Hablamos esta noche?"

"Chiara???"

"Chiara llevo casi un día entero sin saber nada de ti"

"Estoy preocupada, dime que estás bien"

"Buenos días????"

"CHIARAAA"

"No me hagas esto, Chiara. Di algo"

"Voy a llamar a Ruslana"

- ¿Violeta? - contestó la DJ a esa llamada, con una mala sensación en el cuerpo, pues no era mada habitual que la cantante contactara con ella.

- Hola, Ruslana. Perdona que te llame pero, ¿sabes algo de Chiara? - preguntó Violeta, con una preocupación latente en la voz.

- ¿De Kiki? Está contigo, ¿no? - contestó Ruslana, confundida.

- ¿Conmigo? ¡No! Llevo escribiéndole desde ayer por la mañana y ni me ha leído, ni me ha contestado. Estoy histérica. ¿Tú has hablado con ella? Dime que sí.

- A mí me escribió ayer a primera hora. Me dijo que se iba contigo un par de días y que iba a estar desaparecida. Que no me preocupara si no daba señales de vida... - explicó, mordiéndose el labio.

- Pues no... No está conmigo. La última vez que hablamos fue antes de ayer por la noche. Y estaba normal... Pero le he mandado mil mensajes, la he llamado... Y daba señal. Aunque ahora ya no... No entiendo nada - relató angustiada.

- Voy para su casa ahora mismo - decidió Ruslana.

- Madre mía, ¿crees que le ha pasado algo? - se preocupó Violeta, a la que se le pasaban las peores ideas por la cabeza.

- No sé, no creo. Emma me habría avisado. ¿Quizás se ha agobiado? - sugirió Ruslana-. Estaba muy ilusionada en hacer las cosas bien y puede que haya tenido un bajón.

- Ya, pero puede tener un bajón y avisarme. O al menos no mentirte a ti - chasqueó Violeta la lengua-. Esto es un sufrimiento constante, Ruslana.

- No te voy a mentir, un poco sí. Es un erizo huidizo. Estoy a cinco minutos de su casa. Voy a ver si está y cómo está. Y te digo algo.

- Eso, por favor, avísame con lo que sea - pidió la cantante.

- Violeta, si te sirve de ánimos... Es muy difícil que deje entrar a alguien en su cabeza en sus peores momentos, casi imposible. A ti te ha dejado entrar y eso ya es un gran paso. Hacía muchísimo que no me mentía así. Muchos años. Es una excepción. Estoy segura de que es un pequeño bache - alegó la DJ-. Yo ya le dije que la fase luna de miel no iba a durar para siempre si no resolvía temas importantes. Está poniéndose mucha presión para poder estar bien contigo y seguramente le ha sobrepasado...

Ruslana sentía la necesidad de darle a Violeta el contexto que sabía que Chiara no se atrevía a darle. La DJ quería con todas sus fuerzas que eso saliera bien. Que la cantante le tuviera paciencia a la traductora y que pudieran ser felices. Que Violeta no se rindiera si el camino se ponía difícil. Que Chiara tampoco se rindiera y luchara por la felicidad y la paz que tanto merecía.

Ruslana suspiró. Violeta la imitó.

- Vale... - dijo simplemente la cantante, tratando de asimilar toda esa información, sin conseguirlo-. Avísame cuando sepas que está bien, por favor.

Ruslana tocó el timbre de casa de la traductora varias veces, sin respuesta. El móvil de Chiara no daba señal, así que probó con Emma.

La mujer, desde el trabajo, le informó que la traductora se había llevado a Jay a la protectora de animales que visitaban con cierta frecuencia y que pensaban volver a la hora de cenar.