- Denna, ¿qué hago? - preguntó Violeta por enésima vez, mientras su amiga daba un sorbo a la copa de vino blanco que llevaba en la mano.
Ambas se encontraban en casa de la pelirroja. Violeta había invitado a su amiga a cenar para poder contarle todo lo que le pasaba por la cabeza y que la pudiera aconsejar. Necesitaba una visión externa para asegurarse que tomaba la decisión correcta.
Habían pasado seis días desde la videollamada con Chiara.
Los primeros días habían intentado darse espacio, como una jornada de reflexión de una semana sin contaminarse la una a la otra. Pero no había sido posible para ninguna de las dos el contacto cero.
Por eso, habían optado por seguir hablando por Whatsapp cada día, pero sin tocar el tema, ni ponerse demasiado profundas.
- ¿Tú qué quieres hacer? - devolvió Denna la pregunta.
- Eso lo tengo clarísimo - contestó la pelirroja al instante-. Lo que yo quiero hacer, lo que me dice el corazón es apoyarla, esperarla y confiar en que en algún momento pueda estar bien con ella misma y conmigo. Pero, por otro lado...
- Te da miedo, ¿no?
- Me da miedo, por mí y por ella. Por mí, porque sé que lo voy a pasar mal. No quiero ser ingenua. Esto no va a ser algo lineal como yo pensaba. Y siempre voy a estar con la preocupación de que la ansiedad golpee de más y Chiara me aleje, dejándome completamente a oscuras. Como esta vez. No sabes lo mal que lo he pasado - le contó la pelirroja.
- Tienes que sentir mucha impotencia... - supuso Denna.
- Sí. Y sé que ella lo pasa peor, pero claro, a mí me afecta mucho. Y quiero cuidarme también - reflexionó en voz alta.
- Eso te iba a decir. No puedes poner todo tu foco en que Chiara esté bien, pasando por encima de cómo te puedes sentir tú - dijo Denna.
- Desde el principio no ha parado de repetirme que me aleje, que no quiere arrastrarme a sus tinieblas, que no va a poder... Y yo no quiero creerle. ¿Pero y si tiene razón? - suspiró profundamente Violeta-. Denna, si Chiara tiene razón y no cortamos esto, vamos a acabar las dos destrozadas.
- ¿Y si no la tiene y sólo es el miedo? Igual simplemente necesita más tiempo, menos presión...
- Yo no le he exigido nada, Denna - aclaró la cantante.
- Se lo exige ella misma. Si eso lo trabaja... Necesita hablarlo bien con profesionales, eso también está claro. Ahora mismo no cuenta con esa ayuda profesional en condiciones. Y así es muy difícil.
- Ya... - asintió Violeta lentamente, quedándose después en su mundo.
- Le vas a decir que sí, si ella está dispuesta a avanzar. Lo sabes, ¿verdad? - la leyó fácilmente su amiga.
- Ay, es que... Confío tanto en que va a conseguir estar bien... - se mordió el labio Violeta-. No lo puedo evitar.
- Dime que tú también te vas a cuidar - pidió Denna-. Puedes contar conmigo, eso lo sabes. Pero también es importante que te comuniques con Chiara. Que le digas cuando estás mal, sin miedo a que retroceda.
- Eso es muy fácil decirlo...
- Pero tendrás que hacerlo - fue tajante la rubia-. Una relación es de dos. Si ahora Chiara necesita más tu apoyo por sus circunstancias, vale. Pero tú tienes que poder ser tú. Con tus momentos de chica fuerte, empática y segura. Y con tus momentos bajos, de inseguridad y de necesitar que te arropen. Kiki tiene que llegar a ser capaz de darte esa parte también. Aunque no sea ahora mismo.
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Starstruck | Kivi
FanfictionNo hay nada que haga más feliz a Jay que conocer a Violetta, su artista favorita. ¿Qué pasará cuando Chiara, su hermana mayor, le ayude a cumplir su sueño?