Starstruck | Kivi

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- Rus, peli y palomitas en tu casa urgente - pidió Chiara a su amiga, por teléfono, nada más llegar a Barcelona.

Su amiga no puso objeción y, cuando Chiara llegó a su casa, la pelirroja lo tenía todo preparado para una noche de amigas.

- Ay, tengo tantas cosas que contarte que no sé ni por dónde empezar - suspiró Chiara.

- ¿Os habéis liado? - fue lo primero que quiso saber Ruslana.

- Sí - confesó Chiara, bajando la mirada.

Ruslana hizo un baile de celebración.

- ¡Ay, cómo me alegro, Kiki! ¡Esa es mi chica valiente! Me debes una cena, como mínimo, que yo te dije que esto pasaría - exigió la pelirroja.

- No celebres tanto, Rus... Es mucho más complejo de lo que estás pensando - calmó Chiara sus expectativas.

- Contigo siempre es más complejo... A ver, cuéntamelo todo y así no tengo que imaginármelo.

Chiara le relató todos los detalles de su estancia en Valencia, con especial foco en los besos que habían compartido y en la trama enrevesada que Violeta compartía con su supuesto novio oficial.

Finalizó el relato con la situación actual: de vuelta a la casilla de salida.

- O sea que Violetta, una estrella internacional, lleva meses celosa de mí. Wow - dijo Ruslana.

- ¿De todo lo que te he contado eso es lo que más te interesa? ¡Serás egocéntrica! - golpeó su hombro-. ¿Qué opinas de todo lo demás?

- Que no vais a durar sin hablar ni cinco minutos. Kiki, por más que lo intentes, no eres tan fría. De hecho, eres lo contrario a fría y lo sabes. No puedes cortar de raíz algo que está en tu día a día y que te hace bien. Además de no tener sentido, es injusto para ti.

- Pero no puedo dejar que avance, Rus. ¿Qué pasa si seguimos como ahora y me acabo pillando en serio? Luego todo son problemas que no voy a saber gestionar - resopló Chiara.

- Yo entiendo que la situación que tiene con Juanjo te genere dudas, porque es rara.

- ¡Gracias! - alzó las manos Chiara.

- Pero... - la apuntó con el dedo índice-. También te conozco como la palma de mi mano y sé que no es sólo eso lo que te frena. Eso es la excusa, el problema visible, pero aparte hay mucho más detrás. Lo de siempre.

- Rus... - susurró, bajando la mirada.

- Además de a mí, que te viste obligada a contármelo porque apareció en la fiesta de Jay, ¿a quién más le has hablado de Violeta? - cuestionó Ruslana, a sabiendas de que las personas con las que Chiara realmente se abría eran muy pocas. Por no decir que sólo con ella.

- A nadie - admitió.

- ¿A nadie, nadie? ¿Ni a María? - Chiara negó con la cabeza-. ¿Y no se ha dado cuenta de que algo te pasa?

- Ya nos conocemos y sé cómo llevarla.

- Eso es un error, Kiki, cariño - le dijo, con toda la ternura del mundo-. Hacer como si Violeta no formara parte de tu día a día no va a impedir que te enamores de ella.

- Cállate. Shut up. No digas eso - pidió.

- Kiki, no pasa nada por expresar lo que te pasa, y más si son sentimientos bonitos hacia alguien. Quedártelo para ti e intentar hacer como si no existieran, te va a explotar en la cara... ¿O no has aprendido nada?

- No se trata de los sentimientos bonitos, si no de lo que conllevan para mí, Rus. Tú lo ves muy fácil... Pero te juro que a mí solo de hablarlo con ella ya me temblaba todo... No voy a poder ir a más, es muy arriesgado.