-Dos por favor – le dije a la chica de cabello castaño que llegaba a darme miedo con sus grandes ojos – Gracias – le pague las entradas y di la vuelta para encontrarme con mi amigo – ni lo pienses.
- Styles, no es la gran cosa, hazlo por ella.
-No, no voy a hacerlo – empecé a caminar – te dije muy claramente que no quería hacer nada ridículo.
-No es ridículo – dijo siguiéndome. Guarde las entradas en uno de los libros que luego guarde en mi bolso.
-No voy a hacer ese número de circo, no voy a pararme frente a todas estas personas de la escuela y gritarle que vaya conmigo vestido como una bestia.
-Pero si son la bella y la bestia, definitivamente deberías hacerlo.
-No – dije firmemente. No iba a hacer el ridículo solo para que me perdonara, ni siquiera quería ir de todos modos, solo lo hacía por ella.
-Harry...
-No, no insistas, no voy a hacerlo. Lo haré a mi manera, no sé en qué pensaba cuando te pedí ayuda para eso – rodé los ojos.
-Imbécil, ya veras que con mi ayuda todo hubiera sido más fácil – rio – pero está bien, vamos a ver qué tan bueno será tu plan – rio de nuevo – rápido, tenemos clase.
Ella, esa terca y testaruda chica que tanto quería no me hablada, ni siquiera me miraba cuando estábamos en la mesa con mi madre, era el segundo día de esto y no podía aguantarlo, ella sabía lo mucho que la quería y necesitaba a mi lado, y si para arreglar las cosas con ella tenía que ir a ese estúpido baile, lo haría. Suspiré pensando en todo lo que tendría que hacer, buscar un maldito traje, arreglarme el cabello y toda esa mierda, pero algo que no iba a hacer definitivamente seria baila, no, eso no va a pasar, ni en ese baile ni en un millón de años.
Ya con las entradas en mis manos esperaba que todo esto terminara, iba a invitarla cuando estuviéramos en casa. No iba a hacer el ridículo como Liam y todos los que le habían pedido a Tomlinson su ayuda, nunca iba a hacerlo, a disfrazarme de bestia y a preguntarle si quería ir conmigo en frente de toda la escuela, eso es estúpido. Tome mi lugar para la clase y saque mi libreta para tomar los últimos apuntes de esta clase. Lo único positivo de todo esto sería ver a Payton con un vestido, ella siempre se veía hermosa, pero recuerdo el primer baile del año, se veía... ni siquiera hay una palabra que pueda describir lo que sentí cuando la vi. Amaba verla en pijamas, sin nada de maquillaje, solo siendo ella. Pero recuerdo que vi un ángel ese día y todo iba a valer la pena si ese ángel volvía.
A veces sentía que no debía estar con ella, solo quería verla feliz y sonriendo todo el tiempo, pero no creo ser el adecuado, creo que la he visto más llorando y enojada conmigo que sonriendo, pero la amaba y me reusó a pensar en ella con alguien más que conmigo.
*
Llegué tarde esta vez, eran más de las ocho cuando entré a la casa, estaba pensando en que decirle toda la tarde. Estaba hambriento y el olor a comida cuando abrí la puerta hizo que mi estómago sonara. Escuché risas en la cocina, fruncí el ceño mientras me dirigía hacia allá. Cuando entré pude ver a mi madre cocinando, Payton y Robin sentados a un lado, todos estaban riendo – Entonces... el hombre me dije, OH LO SIENTO, pensé que eras el tipo disfrazado de Barnie – todos rieron de nuevo fuertemente. Mi madre se dio la vuelta y sonrió el verme.
-Hijo – se acercó a mi dejando todo a un lado para besar mi mejilla y abrazarme – pasa, estoy a punto se servir la cena.
-Okay – puse mi bolso en la sala y luego volví a sentarme en la mesa, al lado de Payton, ella no hizo nada, ni siquiera se puso tensa a mi lado ¿me habría perdonado ya? O simplemente estaba actuando porque estaba mi madre.
