-Deja de mirarlos – susurre para mí – deja de mirarlos – dije de nuevo con rabia. Había pasado una semana desde que él venía a la casa y no podía dejar de mirarlos desde la cocina mientras estudiaban en la sala. No entiendo por qué lo hago, pero no podía evitarlo. Siempre era lo mismo, estaban concentrados un rato y cada que ella hacia algo bien él la besaba. Tampoco podía entenderla a ella, se suponía que estaba saliendo con ese tipo Malik, sin embargo toda la semana me había insistido con su tonta carta rosa haciéndome enfurecer, la había metido en uno de mis libros, en mi casillero, en el bolsillo de mi chaqueta. No sabía que era lo difícil de entender para ella - Oye - Ambos me miraron esperando que iba a decir – tengo hambre, ¿qué vas a hacer para comer?
-Nada – sonrió.
-¿Nada? – Negó con la cabeza - ¿Estás loca?
-Nope – mordió su labio inferior.
-Muero de hambre – dije con rabia.
-Ya ordenamos pizza, amigo – interrumpió Malik – cálmate.
-Pedí una solo para ti – la mire de nuevo y seguía con esa sonrisa – pero como no sé cuál te gusta, pedí una tradicional- asentí y los dos volvieron su mirada a los libros.
-Creo que tendrás una buena calificación en el examen de mañana, has avanzo lo suficiente.
-¿Tú crees? – ella lo miro y el asintió – Gracias – dijo ella casi en un susurro y él la tomo de la mano.
-Agh – gruñí saliendo de la sala.
Me encerré de nuevo en mi habitación y encendí la televisión. No había nada bueno, entonces lo deje en Discovery en una de esas mierdas sobre aliens. Estuve así, acostado en la cama por lo menos media hora, ya estaba calmado, pero aún tenía hambre – PIZZA – canturreo del otro lado tocando la puerta. Me puse de pie y caminé hasta ella, la abrí y ahí estaba con una sonrisa de oreja a oreja que me daba dolor de cabeza. La tome de sus manos y cerré la puerta en su cara, como hacia siempre – DE NADA – rodé los ojos y volví a mi cama.
Narra Payton
-¿Crees que esté funcionando? – Me senté a su lado en el sillón – ya ha pasado una semana y sigue igual, no mejora ni empeora.
-Créeme, hemos avanzado - me miro mientras me cruzaba de piernas – no como esperaba, pero debe significar algo que nos vigile todos los días desde la cocina.
-¿Lo hace?
-Eres muy despistada – dijo entre risas – Veamos una película – tomo el control y encendió la televisión – tengo mucha hambre y has estudiado muy duro esta semana - sonrió.
-Okay
*
-OYE NO – gritó - ¿qué clase de final es ese? Es una mierda ¿qué pasa después? – Metió a su boca lo último que quedaba de su pizza – ¿Estás… - asentí y seque mis lágrimas – Oh linda – paso su brazo sobre mi hombro y me abrazo – es solo una película.
-Su hermano murió –solloce en su pecho - ¿qué va a pasar con ellos? – habíamos terminado de ver si decido quedarme y no podía dejar de llorar - ¿Qué pasa si mi padre está así? Como ella esperando a morirse o a estar vivo.
-Claro que no – acaricio mi hombro – no pienses en eso, tu padre es un hombre muy fuerte – beso mi frente - calma linda – susurro en mi oído – todo va estar bien – asentí mientras el acariciaba mi rostro con su otro mano.
-Gracias, eres un gran ami…
-SHHHH – lo mire – no digas esa palabra en esta casa – rio.
