Amor en las profundidades

Capítulo 21

A medida que los días pasaban, Hermes continuaba ejerciendo su papel como guardián del equilibrio entre los tres reinos con diligencia y dedicación, su presencia era crucial para mantener la armonía entre los mundos, y los seres del Inframundo lo reconocían como su reina con respeto y veneración.

En el reino del Inframundo, Hermes era tratado con la más alta estima y consideración, los habitantes del inframundo lo adoraban como a su reina, siempre dispuestos a cumplir sus deseos y asegurarse de que estuviera cómoda y feliz.

Hades, por su parte, adoraba a Hermes con todo su ser, cada gesto, cada palabra, estaba impregnada de amor y cariño hacia su esposo y le gustaba demostrarle su afecto de todas las maneras posibles, desde pequeños gestos de ternura hasta demostraciones públicas de devoción.

Cuando estaban juntos, Hades se aseguraba de hacer sentir a Hermes amado y apreciado en todo momento, le ofrecía palabras de aliento y consuelo, compartía risas y momentos íntimos, y siempre estaba dispuesto a escuchar y apoyar a su esposo en todo lo que necesitara.

La relación entre Hermes y Hades florecía cada día más, fortalecida por el amor y la confianza mutua que compartían, juntos, enfrentaban los desafíos del reinado del Inframundo con valentía y determinación, sabiendo que mientras estuvieran juntos, podrían superar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino.