"El Legado de Luz: La Historia de Ninvarty" [HISTORIA COMPLETA]

Renacer

**Capítulo Veinticuatro: El Renacer de Ninvarty**

Despertar tras el sueño con su bisabuela había cambiado todo para Ninvarty. La claridad y el sentido de propósito que había sentido eran como una luz en la oscuridad. Sabía que debía enfrentarse a sus miedos y encontrar la forma de cerrar la puerta que había abierto.

Durante los días siguientes, comenzó a practicar la meditación que su bisabuela le había sugerido. Se sentaba en su habitación, rodeada de velas y con el corazón abierto. Al principio, le costaba concentrarse, pero poco a poco comenzó a sentir una conexión más profunda consigo misma.

El primer paso fue aceptar sus errores. En cada sesión, visualizaba las sombras que la perseguían y, con cada respiración, intentaba enviarles luz. Con el tiempo, esa imagen aterradora comenzó a transformarse. Las sombras, en lugar de ser figuras amenazantes, se convirtieron en partes de su propio ser que necesitaban sanación.

Un día, mientras meditaba, sintió una energía cálida fluir a través de ella. Era como si la voz de su bisabuela estuviera susurrando palabras de aliento, dándole la fuerza que necesitaba. Ninvarty comenzó a confiar en su capacidad para enfrentar los desafíos que tenía por delante.

Decidida a tomar acción, se reunió con Elena y Ana, compartiendo su progreso y su intención de encontrar una solución a la oscuridad que la rodeaba.

—He estado trabajando en mí misma —les dijo, sintiéndose más segura—. Quiero hacer las cosas bien.

Elena sonrió. —Estamos contigo en esto. ¿Cómo podemos ayudarte?

—Quiero intentar un ritual para sellar el Tercer Ojo y protegernos de las sombras. Pero necesito su apoyo —respondió Ninvarty, sintiendo que finalmente había encontrado el camino.

Las amigas se unieron a ella, preparándose para la noche del ritual. Juntas, reunieron los elementos necesarios y crearon un ambiente sagrado. Al caer la noche, se sentaron en círculo, unidas por la determinación y la esperanza.

Ninvarty comenzó a recitar las palabras que había aprendido, sintiendo que la energía se acumulaba en el aire. Con cada palabra, la conexión con su bisabuela se hacía más fuerte. Las sombras parecían atenuarse, como si su voluntad estuviera resonando en el universo.

Al final del ritual, Ninvarty sintió un profundo alivio. Aunque sabía que el camino no había terminado, había dado un paso crucial hacia la sanación. Las sombras ya no parecían tan amenazadoras, y la luz dentro de ella había comenzado a brillar con fuerza.

Con cada día que pasaba, Ninvarty se sentía más empoderada. La magia, una vez vista como un enemigo, se convirtió en una aliada. Estaba lista para enfrentar su destino, sabiendo que su bisabuela la guiaba y que nunca estaría sola en su lucha.