Cap. 45: "Es hora de marchar"

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Enywen se puso de pie y salió tras Diandra, Karin estaba completamente humillada y gritaba a todo pulmón, nadie podía calmarla ¿Qué clase de broma estúpida había sido eso?

-¿Qué está sucediendo? – Chilló Harry volviéndose hacia Aldrick - ¿Nos bailaron la danza del amor? ¿Por qué?

-¿No se supone que ellas deben ayudar? ¿Por qué hacer eso?

-Las hadas son celestiales – Habló Sakai – Saben del amor fraternal y son relativamente pocas, las que saben del amor carnal… ellas piensan que un hechicero cambia de sentimientos fácilmente… por eso hicieron eso… Un poco inocente de su parte…

-Supongo que cuando lleguemos al reino de Stromkarl, la Reina Irina nos explicará esta situación… - Dijo Nienna

-Ciertamente – Interrumpió Altariel – El mensaje fue claro, nos están cazando de día y de noche, en el cielo y por tierra, debemos seguir el rastro de los arcoiris, aunque nos desvíen del camino…

-Audrina no actuó de mala fe, solo que es ingenua al sentimiento humano.

-Claro que hirió los sentimientos de Diandra…

-Di…- Murmuró Harry y salió corriendo.

Diandra estaba de pie frente al lago, cuando Enywen se acercó a ella, serena, lucía majestuosa, con esa tiara brillante en la frente, sus largos cabellos se mecían con suavidad y miró por un breve momento, su reflejo en el lago, que le hizo un guiño y ella se compuso la tiara.

-¿Estás bien?

-No…

-Audrina pegó duro ¿verdad?

-Tiene razón…

-No… no la tiene… Amas a Harry, es natural… al principio lo odiabas, pero terminaste queriéndolo… Ellas lo único que desean es que Harry llegue con la mente fría al bosque… para que destruya la maldición y pueda volver a su mundo…

-Lo se…

-Creo que a veces olvidan lo que hay en ese bosque… el bosque se maldijo por la pérdida del gran amor… y es eso, lo que le devolverá la paz… se que ya están hartos de escucharlo pero… Amor y Sacrificio es la palabra…

-¿Tendremos que sacrificar amor dentro del bosque?

-Si…

-No es justo…

-Diandra… Solo te daré un consejo… primero te diré… no te preocupes por Basalik y sus tretas… el camino es peligroso, pero nosotros los defenderemos… por cielo y tierra… no queremos que los hechiceros luchen, porque se desgastarían…

Diandra tenía los ojos enrojecidos y miró fijamente a Enywen.

Como no podía llorar, eso la lastimaba más.

-Cuando lleguemos al reino de Karin, estaremos a un día del bosque maldito… y del comienzo de la lucha…

-Si…

-Por eso te doy mi consejo…

-¿Cuál?

-Que hasta ese momento, no te despegues de Harry, quiérelo, ámalo, vívelo… bésalo todo lo que puedas… entrégate a el, las veces que quieras… siente tu amor por el… Porque una vez entrando al bosque… todo puede cambiar… sobre todo para ti… que perteneces a ese lugar…

-Si el regresa a casa será sin mi… ¿verdad?

-No adelantemos nada – sonrió y al ver a Sakai, tomando un respiro afuera, Eny se despidió de Di y dirigió sus pasos hacia el elfo de luz, cruzándose con Harry que bajaba a toda velocidad hacia el hada.

La Leyenda del Hada y el MagoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora