23. Sanar

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No había noticiario que no estuviera hablando de la supuesta muerte del chico, después de todos los eventos sucedidos aquel día, los medios no desaprovecharon la oportunidad para sacar al público todo lo relacionado a este importante heredero, incluso la misma familia Morningstar había sacado un comunicado comentando que se encontraban absolutamente destrozados por saber que su querido primo, sobrino y nieto había dado su último adiós.

Para hacer todo más creído, Bad y Foolish se quedaron a cargo de Las Nevadas junto a Cucurucucho el QSMP, respectivas áreas lanzaron sus propios comunicados lamentando la situación, como se colocaron listones negros.

Todo esto era presenciado por el mismo Quackity, quien miraba aquel enorme televisor las noticias pasando canal por canal, Luzu y Roier se encontraban en la habitación, mirando con preocupación el desastroso estado de su amigo, él cual no solo usaba aquella pijama que le habían dado, sino su descuidado aspecto usando lentes y aquel cabello revuelto dejaban mostrar que no se encontraba bien.

El chico apagó el televisor sumergiéndose en el silencio, había despertado ya hace dos días atrás siendo recibido por Luzu, seguido de todos, un animado y feliz Roier, quien no dudó en abrazarlo, como sus otros amigos, todos mostrando alivio y felicidad. Haworth le explicó que le había sucedido y como había sido llevado a una de las múltiples residencias de Vegetta.

–Quackity…

–Quiero estar solo.

Roier se sintió un poco mal, ya que desde que había despertado, su amigo se había portado cortante y distante con todos. Por lo que se disculpó, dejando a Luzu y a él solos.

–¿No escuchaste? Dije que…

–Te escuché desde la primera vez, pero creo que necesitamos hablar tú y yo.

–No hay nada de qué hablar Haworth, creo que me dijiste lo suficiente hace dos días.

El castaño suspiro, estaba acostumbrado al rechazo del menor, pero le sentaba mal ver como su hermano se mostraba apagado por el rechazo de su mejor amigo. Esperaba que recibiera gritos por parte de Morningstar, un insulto, pero después todo volvería como siempre. Aunque no fue así, era peor cuando Quackity se comportaba de aquella manera, antes que un enojo o molestia, recibir el silencio de aquel pelinegro lo lastimaba.

–Solo te pido que no seas tan duro con Roier, él no planeó todo esto. Si quieres odiar a alguien que sea…

–Sé perfectamente que Cellbit y tú han estado conspirando juntos, ya me lo dijiste. Pero eso no quita el hecho que Roier, como Rubius y los demás también tuvieron peso en esto.

–¿Por qué estás tan molesto? Si no hablas nunca podré saber cómo ayuda…

–¿En serio quieres ayudarme?

–Siempre quise ayudarte Quackity.

–Lo que debieron haber hecho es no hacer nada, así me hubieran ayudado.

El mayor se mostró sorprendido al ser recriminado por el contrario.

–¿Cómo puedes decir eso? ¿Sabes lo que significa eso?

–Se perfectamente lo que significa, no soy un idiota.

Le encaró, provocando que ambos iniciaran una discusión acercandose.

–Pues déjame informarte que estás actuando como uno. ¿En verdad simplemente pensabas morir?

–Es mi vida Luzu.

–Por eso mismo es que no puedes solo hacerlo, tus abuelos, tu familia, ellos iban a matarte.

–Eso lo sé bien, yo estaba listo. Lo que debieron hacer Roier y tu, fue callarse y aceptar el maldito dinero.

love's dissonanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora