30. Te elijo a ti

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La parte más difícil de toda la situación es que no encontraba una forma sana de sacar aquel dolor. Muchos herederos buscarían el lugar que él mismo ocupaba, pero eso era algo que Quackity jamás le desearía a nadie. Ser el centro de atención, tener la atención de todos en su persona, esperando por cumplir sus expectativas sin fallar. Debía ser perfecto, justo como sus abuelos le enseñaron prácticamente toda su vida, las imperfecciones de una persona no estaban bien recibidas, ni eran motivo para sentir empatía a su persona.

Era demasiado duro tener que cumplir las expectativas de personas que ni siquiera conocía, sus primos le odiaban y le tenían envidia por ser aquello que denominaban el heredero perfecto, criado desde niño para no cometer ninguna falla, saber cómo dirigirse y hablar ante la sociedad. Pero Quackity era quien más envidia les tenía a sus queridos primos, quería ser como ellos la parte invisible de su familia, lejos de las miradas ajenas, siendo él mismo.

–¿Por qué no hablas con Luzu?

Se detuvo mirando a Roier, quien lucía un poco serio.

–He estado ocupado Roier, incluso contigo no he podido hablar…

–Si, pero incluso cuando él va a ver a tu tío…

–Los negocios y mi familia me tienen ausente, además confió en su juicio, si fuera a suceder algo sé que me tío también me diría.

–¿En serio haces esto porque estás ocupado o por los sentimientos que tienes?

Se detuvo sorprendido.

–¿Tu lo sabias?

–No puedes culparme de que me cuente cosas como estás, él es mi hermano y tú eres mi mejor amigo.

–Entonces dile que pare.

–¿Y por qué?

–Roier.

–Alex –contestó en un tono mucho más serio– No creo que quieras tener este tema, digo te la has pasado evitando a mi hermano y aunque sea un relativo pendejo, es mi hermano y me duele también que seas así con él.

–Yo no puedo corresponderle.

–Es así, pero no por no poder, tienes que comportarte tan mal con él. Creí que al menos se estaban llevando mejor, antes se querían arrancar la cabeza.

–Solo estoy intentando marcar mi distancia.

–Alex por favor… Lo que menos quería era que hubiera problemas entre ustedes, se llevaban mal en el pasado, pero a pesar de las constantes peleas, éramos una familia –suspiro tomando la mano de su mejor amigo– Solo quiero que puedan comportarse como los dos adultos que son sentarse y hablarlo.

–¿No me vas a pedir que considere su falsa propuesta?

–Lo que te estoy pidiendo es que en verdad por favor, piensa en ti. Te la has pasado todo el tiempo protegiéndote, claro que te lo agradezco. Pero sigues sacrificando tu felicidad, mi único deseo es que seas tu mismo y seas feliz.

–Roier, yo soy…

–No tienes que contestar ahora, solo piensalo. Si tu felicidad es dirigir una enorme compañía sin nadie más que buenos amigos o si incluso aceptas a mi pendejo hermano está bien, siempre tendrás mi apoyo lo prometo.

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Aquella noche se haría uno de los bailes dirigido solamente para las familias con nombre de la ciudad, Quackity se sorprendió un poco cuando Jschaltt lo había llevado aquel sitio, conocía bien a aquel hombre. Esperaba asistir a una de las fiestas más ilegales de todas, llena de orgías, vicios en exceso y alcohol a montón, pero se encontraban en aquel lugar rodeado de personas importantes e influyentes.

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