𝙂𝙍𝘼𝙑𝙄𝙏𝙔 𝙁𝘼𝙇𝙇𝙎 ๏ภє-รђ๏Շร

🌲002🌲

"No sé quién está más loco. Yo por juntarme contigo o tú por querer subir al ventanal al estilo Romeo y Julieta "

—Dipper Pines🌲

┈┈┈┈ • •

Una piedrita impacto en el ventanal del segundo piso de la cabaña. Casi al instante, dipper se asomó por ahí y te vió de pie, con más piedritas en tus manos. Con una fuerza (quien sabe de donde la sacó) abrió el ventanal para poder hablarte.

—¿___?—. Preguntó asomándose ligeramente.bera algo inusual verte ahí, más aún en estos días. Hace ya tiempo que no te cruzaba.

—¡Hola, Dipp-Dipp!—. Saludaste con entusiasmo, dejando las piedras en el suelo—. Vine a ver cómo estabas. Mabel dijo que estarías en tu cuarto.

—¿Y por qué no entraste directamente si ya eres de confianza?—. Preguntó con una sonrisa juguetona.

—Me dió flojera.

—Oh, vale.

De pronto, se te ocurrió algo mejor. Con agilidad, te sostuviste de la calamina del techo de la cabaña y empezaste a intentar subir por el ventanal.

Dipper no pudo evitar reírse preocupado por tu accionar. Era tan típico de ti hacer las cosas de una manera inesperada, y él lo encontraba divertido, aunque un poco... extraño.

—No sé quién está más loco— dijo, apoyando los codos en el alféizar de la ventana mientras te miraba con una sonrisa—. Yo por juntarme contigo o tú por querer subir al ventanal al estilo Romeo y Julieta.

—Vamos, Dipp— bromeaste, haciendo fuerza para poder subir al techo—. Un poco de dramatismo no le hace daño a nadie. Además, es mucho más emocionante así, ¿no crees?

—Si te caes, vas a tener que encontrar otra excusa más convincente— respondió, aunque en su tono había más diversión que preocupación.

Te reíste, sabiendo que él tenía razón, pero eso no iba a detenerte. Luego de subir, caminaste con ambas manos extendidas a los lados para mantener tu equilibrio.

—¿Estás loca?— dijo Dipper, ahora un poco más serio—. Mira, mejor entra por la puerta. Ya sabes, como una persona normal.

—Pero, Dipper, ¡esto es más divertido!— insististe, ya cerca del ventanal.

Dipper suspiró, resignado, pero con una sonrisa en el rostro.

—Está bien, está bien, pero si te caes, yo no te voy a recoger, ¿eh?

Luego de casi morir de los nervios, Dipper se asomó más por el ventanal.

—De acuerdo, Romeo, sube— dijo, estirando su mano hacia ti—. Pero la próxima vez, usa la puerta, ¿vale?

Tomaste su mano, y con su ayuda, lograste entrar en la ventana. Cuando finalmente estabas dentro, ambos se quedaron un momento en silencio, mirándose, hasta que Dipper rompió la tensión con una suave risa.

—Te dije que estabas loca— murmuró, sacudiendo la cabeza, pero con una sonrisa que no podía ocultar.

—Y a ti te encanta, Julieta— replicaste, dándole un pequeño empujón en el hombro.

—Tal vez— admitió Dipper, mientras ambos se sentaban en el borde de la ventana, compartiendo una de esas risas que solo los mejores amigos entienden.