𝙂𝙍𝘼𝙑𝙄𝙏𝙔 𝙁𝘼𝙇𝙇𝙎 ๏ภє-รђ๏Շร

El idiota de tu novio | Dipper Pines

Edad de ambos; 16/17

Dipper sabía cómo era tu novio. Un chico estúpido que no te valoraba, claro estaba. No podía entender cómo podías estar con ese tipo, y cada vez que lo veía, sentía una mezcla de frustración y celos que le quemaba el pecho.

Desde hace tiempo, Dipper había desarrollado sentimientos por ti. Eras su mejor amiga, la persona con la que compartía sus pensamientos más profundos, y aunque te quería de una manera especial, decidió no interferir cuando se dio cuenta de que ya tenías pareja.

Había optado por mantener sus sentimientos en silencio, creyendo que mientras fueras feliz, eso era lo único que importaba. Pero, ¿realmente lo eras?

Esa noche, en la Cabaña del Misterio, una de esas fiestas que se organizaban cada tanto estaba en pleno apogeo. Luces de colores iluminaban la sala, y la música retumbaba por todos lados. La atmósfera estaba llena de risas, pero Dipper no podía evitar que sus ojos te buscaran en medio de la multitud.

Cuando finalmente te vio, sonrió sin poder evitarlo.

Te encontrabas al otro lado de la habitación, con un vestido que te llegaba un poco más abajo de las rodillas. Te quedaba realmente bien, resaltando tu figura de una manera sutil pero hermosa. Para Dipper, te veías perfecta.

Con nervios, pero dispuesto a hablarte, se abrió paso entre la gente hasta llegar a ti. Cuando finalmente estuvo a tu lado, te sonrió, intentando mantener su tono casual, aunque por dentro, su corazón latía más rápido.

—Hey, ___— dijo, alzando la voz un poco para que pudieras escucharlo por encima de la música—. Te ves... genial esta noche.

Tus ojos brillaron al verlo y le devolviste la sonrisa.

—¡Dipper! — exclamaste, feliz de verlo—. Gracias, tú también te ves muy bien.

Dipper se rascó la nuca, sintiendo cómo el calor subía a sus mejillas.

—Ah, gracias— respondió, sintiendo que sus palabras eran inadecuadas en comparación con lo que realmente quería decirte. En ese momento, notó que tu novio no estaba cerca, y no pudo evitar preguntarse si estarías mejor sin él.

—¿Dónde está tu novio?— preguntó, intentando sonar despreocupado, aunque había un toque de amargura en su voz que intentó esconder.

Suspiraste, bajando un poco la mirada.

—No lo sé...— murmuraste, jugando con la orilla de tu vestido—. Estaba aquí hace un rato, pero creo que se fue a... no sé, a hablar con alguien más.

Dipper sintió una punzada de ira hacia él.

¿Cómo podía dejarte sola en una fiesta, cuando deberías estar pasándola bien juntos?

Pero no quiso hacerte sentir peor, así que solo asintió.

—Bueno, si quieres, puedo quedarme contigo un rato— sugirió—. No quiero que estés sola. Además, no hemos tenido la oportunidad de hablar mucho últimamente.

Tu rostro se iluminó con una sonrisa genuina.

—Eso me gusta— respondiste, tomando su brazo en un gesto de confianza—. Siempre es bueno estar contigo.

Dipper sintió un nudo en la garganta. Quería decirte que merecías algo mejor, que él siempre estaría allí para ti, pero en su lugar, solo apretó suavemente tu mano ante el gesto que habías hecho.

Hablaron durante unos momentos, sumergidos en la conversación como solían hacer cuando estaban juntos. Todo parecía ir bien, hasta que, de repente, un brazo rodeó tu cintura y un beso fue plantado en tu mejilla. Sobresaltada, giraste la cabeza y te encontraste con la sonrisa complacida de tu novio, Drake.