capitulo 16

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Ya era de noche y me dirigía a la habitación de mi hermano para descansar después de haber acompañado a Triscan de regreso a Elanoir. Al parecer, Tessia está un poco golpeada, pero bien. También me contó su día con Arthur con mucha alegría, eso siempre me gustó de la pequeña Tess, es una niña que desprendía un aura sensible.

Mientras pensaba en que ahora tenía tres hermanos menores, por fin llegaría a la habitación, pero me detendría antes de entrar al sentir una firma de maná algo peculiar, pero rápidamente retomé mi camino entrando a la habitación.

Dejando ver a mi hermano Arthur, pero mi vista se clavó en la pequeña criatura de color obsidiana y ojos color dorado, líquidos como los míos.

Hola amiguita, ¿cómo estás? -dije en un susurro a la hija de Silvia, quien me veía con interés mientras inclinaba su cabeza de un lado a otro.

'Kyuu~¡'.

Me parecía muy linda, era como un pequeño lagarto de escamas negras, las cuales eran suaves a pesar de su apariencia rígida. Por primera vez una sonrisa se dibujó en mi rostro al ver a la hija de Silvia, pero tan rápida como llegó, se fue.

Lo siento... lo siento, amiguita. No pude salvar a tu mamá, pero prometo que no dejaré que nadie te lleve lejos de nosotros, ¿sí? -dije mientras acariciaba su linda cabecita mientras ella me veía con tanta curiosidad.

Hasta que de repente sus pequeños colmillos en mi muñeca causaron un leve dolor, pero nada insoportable.

'¿Qué pasa, tienes hambre?' -pregunté a la pequeña dragoncita que me había mordido,

'Kyuu~¡'. Quién

Mis ojos se abrieron con sorpresa al ver como la pequeña dragoncita había formado un vínculo conmigo. 'Soy el hermano mayor de tu papá', -dije mientras señalaba a Arthur, quien estaba dormido,

'Kyuu~¡'. '¿Tío?',

'Sí, soy tu tío', -dije mientras le acariciaba su linda cabecita que, al parecer, le gustaba, ya que ronroneaba de felicidad.

'Dime cómo te llamas', -pregunté a la bebé dragón, quien me volvió a ver con curiosidad mientras se acercaba a mi regazo,

'Kyuu~¡'. '¿Silvie?',

'Mmm, ya veo, un nombre muy bonito, ¿verdad?', -dije mientras la pequeña Silvi sonreía con orgullo por su nombre nuevo. Después de ese bonito momento, Silvi se dormiría en mi panza, por lo que tuve que dormir recto para no interrumpir su sueño de la pequeña dragoncita obsidiana.

Al día siguiente, después del amanecer, Tessia y Arthur saldrían para entrenar con Virion, pero sorprendentemente, Silvi decidió quedarse a dormir conmigo hasta tarde, lo que me pareció bien, ya que era muy linda. Me preguntó hasta qué hora dormiría,

'Kyuu~¡', 'Tío',

'Mmm, sí', -dije casi medio dormido a la dragoncita que se encontraba sobre mí,

'Kyuu~¡', 'Hambre'.

Gruñó la pequeña dragoncita mientras daba pequeños saltos sobre mi estómago, hasta que desperté y la cargué en mis brazos mientras me miraba con emoción.

'Kyuu~¡', 'comida'.

'Sí, vamos a comer', -dije mientras me cambiaba de ropa para luego salir de la habitación con Silvi en brazos, quien movía la cabecita de un lado a otro de manera alegre.

Después de llegar a la cocina y decirle a los cocineros que me dejaran preparar mi propio almuerzo como siempre, prepararía un poco de carne estofada y leche tibia de almendra para Silvi, quien parecía disfrutarlo mucho, ya que se comió una cantidad de carne equivalente a dos veces su tamaño y después de eso se acurrucó en mi regazo, probablemente para absorber mis recuerdos y aprender, lo cual me pareció bien, ya que 200 años de experiencia le servirán para crecer mentalmente. Pensé al ver cómo se acurrucaba en mi cabeza.

tbate par de Reyes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora