Después del incidente en la cocina, Faye se sintió inquieta. Sabía que algo no estaba bien y que necesitaba respuestas. Así que se dirigió a su jefe y le pidió:
—Jefe, ¿podríamos revisar las grabaciones de la cámara en la cocina de la estación? Creo que podría haber algo más detrás de esto.
El jefe, reconociendo la determinación de Faye, asintió.
—Está bien, hagámoslo —respondió, y ambos se dirigieron a la sala de monitoreo.
Al sentarse frente a la pantalla, el ambiente era tenso. Faye miró con atención mientras el video comenzaba a reproducirse. Ambos se concentraron en la imagen, observando cada detalle.
De repente, la grabación mostró a García acercándose al cocinero. Faye frunció el ceño al ver que García hablaba con él, y su corazón se aceleró al notar que el cocinero, aparentemente confiado, le indicaba que la comida que estaba preparando era para Yoko. Luego, García, con una sonrisa maliciosa, esperaba el momento perfecto para agregar dos cucharadas grandes de picante a la comida destinada a la chica.
Faye no pudo contener su ira. Se giró hacia el jefe, con los ojos brillantes de frustración.
—Esto es inaceptable, jefe. García lo hizo a propósito —dijo, su voz cargada de indignación.
El jefe asintiendo, su rostro también muestra descontento.
—Vamos a hacer que pague por esto —dijo, decidido.
Sin perder tiempo, el jefe llamó a García a su oficina. Cuando el oficial entró, se mostró despreocupado hasta que el jefe le indicó que mirara la pantalla.
—García —comenzó el jefe, su tono severo—, necesito que veas esto.
La grabación mostró claramente su acción desleal, y el ambiente se volvió tenso mientras sus compañeros de trabajo observaban en silencio. La vergüenza se reflejaba en el rostro de García, quien trató de defenderse.
—No es lo que parece —dijo, balbuceando.
—¡Claro que lo es! —interrumpió el jefe, furioso—. Te ganaste un reporte de mi parte y una semana de suspensión de actividades.
García se quedó en silencio, incapaz de encontrar palabras para defender su acción. El jefe continuó:
—Tu comportamiento es inaceptable para un oficial de policía. Ningún solo ha puesto en peligro la salud de una persona, sino que también ha demostrado una falta total de profesionalismo.
Con su castigo impuesto, García salió de la sala, su rostro mostrando una mezcla de enojo y humillación. Faye se sintió aliviada, pero también preocupada por lo que podría significar esto para Yoko. Sabía que necesitaba hablar con ella y asegurarme de que estaba bien.
—Gracias, jefe —dijo Faye, sintiéndose más segura al saber que había defendido a Yoko—. Haré todo lo posible para asegurarme de que esto no vuelva a suceder.
El jefe irritante, complacido con la valentía de Faye y su dedicación hacia Yoko.
—Confío en ti, Faye. Sabes que siempre puedes contarme.
Ambas mujeres se habían enfrentado a un nuevo desafío juntas, y su lazo solo se fortaleció.
ESTÁS LEYENDO
Entre Lados: Amor y Ley
FanfictionEn un barrio donde las pandillas son parte del paisaje urbano, Faye es una oficial de policía comprometida con su deber. Su vida da un giro inesperado cuando se cruza con Yoko, una joven inteligente y decidida, atrapada en una pequeña pandilla que s...