36 La Pregunta

50 9 0
                                    

Aquella noche, después de un largo día en la estación, Faye invitó a Yoko a cenar. La había llevado a un pequeño restaurante cerca de la costa, un lugar tranquilo con una vista perfecta de la ciudad iluminada y el sonido suave de las olas.

Mientras cenaban, ambos disfrutaban de la paz de la noche, hablando de lo mucho que habían cambiado sus vidas en los últimos meses y de lo increíble que era el vínculo que habían formado. Faye la miraba con una mezcla de orgullo y cariño, notando cómo Yoko no solo era su mejor amiga y compañera en todo, sino también alguien que despertaba en ella emociones tan profundas como el amor.

Terminada la cena, Faye se aclaró la garganta, nerviosa como pocas veces antes. Yoko la miró curiosa, inclinándose ligeramente hacia ella.

—¿Todo bien, Faye? —preguntó Yoko, divertida.

Faye respiró hondo y, con una sonrisa suave, tomó la mano de Yoko.

—Yoko, hemos compartido tanto en tan poco tiempo... He llegado a conocerte de una forma que jamás imaginé. —La miró con los ojos llenos de emoción—. No quiero imaginar mi vida sin ti. Sé que somos algo especial y que todo lo que hemos pasado nos ha acercado cada vez más. Así que... ¿quieres ser mi novia, oficialmente?

Yoko la miró sorprendida, los ojos abiertos por la emoción y una sonrisa que no podía ocultar. Luego, presionó la mano de Faye y ascendió con energía.

—Sí, Faye. Sí, quiero ser tu novia. —La voz de Yoko temblaba por la emoción.

Faye no pudo contenerse y la besó, sintiendo que en ese momento todo encajaba. Al separarse, ambos compartieron una sonrisa que reflejaba la conexión que habían forjado a lo largo del tiempo, entre risas, desafíos y apoyo mutuo. Aquella noche, bajo las luces de la ciudad, se sintieron felices de poder empezar esta nueva etapa juntas, dejando atrás cualquier duda y abrazando un amor que solo parecía fortalecerse cada día.

Entre Lados: Amor y LeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora