I'll recover if you keep me alive (TERMINADA)

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Narra (tn):

-¿Sam que demonios esta pasando?¿Y quienes eran esos hombres?-le pregunté confundida y un poco asustada. La verdad es que la situación no era para nada llevadera ni mucho menos, para colmo Sam seguía sin prestarme atención.

Cogió el móvil del bolsillo como si nada y llamó.

-Sí...Me da igual lo que te dije...Joder quieres solo venir y ya esta...Esta bien iré yo...No me vengas con eso ahora...Joder que ya lo sé!...-lo oía decir.

La verdad es que no tenía idea de con quien hablaba. Suponía que con alguno de los chicos, pero estaba muy alterado. Y un Sam alterado equivale a un Sam imprudente y impulsivo.

Cuando termino de hablar por el móvil se giró y clavó sus ojos en mi rostro.

-Nate vendrá a buscarte ahora...Dentro de dos o tres días te recogeré; mientras tanto estarás en su casa y no en otro lugar. Así que suspende cualquiera de los planes que hayas hecho.-me dijo firme.

-¡¿Qué?!-protesté.-¿Qué se supone que soy ahora?¿Una prisionera?; además, con Nate?, creía que no os hablabais después de lo ocurrido...

-No quiero reproches (tn), es por tu seguridad, hazme caso esta vez te lo pido. Esto no es un juego.-me respondió fríamente.

-Sam...Sabes que odio que me trates así...No soy una niña.-me quejé de nuevo.

-(tn) no empieces...-dijo él apretando la mandíbula.

-¡No empieces tú!, deja de mentirme, de ocultarme cosas!, creía que ya habíamos hablado de eso...-dije enfadada.

-¡¿(tn) te crees que esto es fácil para mí?!. ¡¿Te crees que me gusta tener que tragarme mis palabras y pedirle a Nate que cuide de ti?!-dijo con ira.

-Creía que ibas a cuidarme tú...-le dije cabizbaja, apartando mi mirada de la suya.

Él dejó ir una respiración pesada y larga, luego se acercó a mi y me abrazó.

-Lo sé pequeña...Pero no puedo hacerlo, no puedo ocuparme de esos hombres y al mismo tiempo cuidar de ti...Lo siento mucho.-me dijo suavemente esta vez.

-Yo puedo cuidarme sola...-le sugerí.

Él dejó escapar una pequeña risa que hizo que su pecho vibrara junto al mio.

-No te hagas la valiente...-me advirtió.-Llevo más tiempo metido en esto que tu.

Y tenía razón.

-Ten cuidado.-le dije y lo abracé más fuerte.

-Se buena.-me respondió.

-Te quiero.

-Te quiero.-me respondió.

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Estaba en casa de Nate, tumbada en la cama de la habitación de invitados. Allí pasaría mis próximos tres días.

No sabía en que demonios iba a ocupar el tiempo, sobretodo porque estaba el hecho de que no podía salir de casa.

Era horrible.

-(tn) quieres ver alguna película?-me preguntó Nate apoyándose en el marco de la puerta que yacía abierta.

-No me apetece ahora...-le respondí.

La verdad es que el hecho de estar con Nate era verdaderamente incómodo.

-Esta bien...-me dijo sin interés.-(tn) se que hemos tenido nuestras cosas en el pasado pero quiero que...-empezó a decir al cabo de unos minutos, pero yo lo interrumpí.

-No importa Nate. Pero no se va a repetir. El pasado es pasado. Y yo quiero a Sam.-le dije tajantemente.

-Bien. Pues dejémosolo ahí.-me respondió.

-Sí.-le dije sin mirarlo.

Nate se giró para irse, pero antes de que pudiera hacerlo lo llamé.

-Nate espera...-le dije.

-¿Qué?-me respondió frunciendo ligeramente el ceño.

-Tengo que pedirte una cosa...-empecé a decir.