Capítulo 43

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Insultos y lamentos, era todo lo que podía escuchar, me pregunto en que situación están los padres de Dante.

-¿Victoria?.

Era Leonard, se veía un tanto sucio, tenía rasguños es sus brazos y unos pocos en su rostro.

-Leonard -le respondí mientras él seguía caminando hacia mi-, ¿estas bien?.

-Si sólo tengo rasguños y moretones, nada grave.

-¿Y Smaug?.

-Él esta bien -me respondió-, un poco más dañado que yo, pero vivirá.

Nuevamente el salón principal estaba lleno y se notaba considerablemente que la cantidad es menor a la que salió hace unas horas.
Varias personas estaban entrando a la misma puerta donde estaba Dante, al parecer no era la unica persona ahí dentro, niños, y más niños salian de ese lugar, subí las escaleras, y... Un momento, sólo le puse seguro a la puerta pero no la cerré con llave, ¿se abra salido o habrá permanecido ahí?, solo habia una forma de descubrirlo, aumente la velocidad de mis pasos hasta el punto de estar corriendo, llegue al cuarto y lentamente quite el seguro de la puerta para luego abrir la puerta, vacío, tal vez se fue, pero, ¿por qué dejó el seguro puesto?, probablemente para hacerme creer que estaba ahí dentro, lo dudo mucho, o es posible que aún este aquí escondido, lo buscaría pero no tengo intenciones de hacerle daño y creo que debería dejarlo en claro para no tener problemas con él.

-Dante -dije alzando la voz-, no sé si estés aquí, pero en caso de que lo estés; ya a terminado todo, por ahora, los adultos han regresado puedes bajar y buscar a tus padres, suerte.

Deje medio cerrada la puerta y baje al salón principal, todavía había una buena cantidad de personas reunidas, Smaug y Leonard estaban platicando entre ellos, por última vez veo la hora en aquel reloj; 4:40 pm.

-Leonard -dije interrumpiendo su conversación-, necesito que me hagas un favor.

-¿Favor? -dice Smaug-.

-¿En que te ayudo Victoria?

-Necesito que me muestres como regresar a casa, sé que estas cansado, solo te pido esto y te prometo no volver a molestarte.

-¿Qué te sucede? -dijo después de un largo    silencio-.

-Un mal sueño -siento escalofríos de sólo recordarlo -, pero ese no es el punto, ¿qué hago yo aquí?, ¿qué hicieron?.

-No le dejaste otra opción a Bardo, te estabas saliendo de control y para evitar que te metas en problemas nos dejó encerrados aquí.

-¿"Nos"...?.

-Si, "nos" -dijo en tono irritado-, luego de que te desmayarán, me lo hizo saber y como esra de esperarse, me negue y termine con un chichón en la cabeza y todo por tu trtrasero.

-No lo entiendo Alexander, si Bardo hiba a terminar encerrandonos, ¿por qué nos lo dijo?.

Espera un momento, es imposible que ella este viva, yo vi su cuerpo, esto no tiene ningún sentido, debo salir de aquí para iniciar el interrogatorio de Bardo.

-¿Alguna idea de como salir? -dice Alexander, interrumpiendo mis pensamientos-.

Esa era una excelente pregunta, no tengo la más remota idea de como salir de aquí, pero si estoy seguro de una cosa; lo que sea que se me ocurra, será una idea desesperada.

Gota rojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora