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—Apurate, Sirius —susurra James cerca de mí.

Agarro el lápiz labial para terminar mi obra maestra, Charlie sale de nuestro baño y mira lo que estamos haciendo.

—¿Pero qué rayos le hacen a mi hermano? —pregunta secándose el cabello.

—Ya verás, solo... ayúdanos con la actuación —Charlie sonríe cómplice y de acerca a Remus mientras se pone su túnica de la escuela.

—¡Remus! ¿Sabes cuánto falta para que las clases inicien? —pregunta Charlie fingiendo estar enojada— ¡Primer día y llegaremos tarde! ¡Juro que te mataré!

—¡¿Pero qué rayos...?! —Remus se despierta sobresaltado y mira a todas las direcciones, James y yo nos encontramos guardando nuestras cosas, o eso es lo que él cree, estamos guardando las pinturas mágicas que usamos sobre su cara— ¡Voy!

Remus se levanta y se empieza a cambiar, despertando a Peter de un sobresalto, el pobre Peter se empieza a cambiar rápidamente, tropezándose con su pantalón.

Peter siempre sufre con nuestras bromas.

—¡Vamos! —dice Remus agarrando la mano de Charlie y arrastrándola por toda la Torre de Gryffindor.

Al llegar al Gran Comedor, los otros estudiantes ven a Remus y empiezan a murmurar, Remus parece darse cuenta de todas las miradas dirigidas a él.

—¿Tengo monos en la cara? —pregunta entre molesto y confundido.

—Bueno... no exactamente —murmura James sonriendo.

—Puede que no sean monos —digo mordiéndome el labio inferior mientras nos sentamos—, pero es casi igual

—Bueno, si decimos que los unicornios son parecido a los monos, sí, entonces es casi igual —dice Charlie agarrando un pedazo de pollo.

—¿Unicornios? —pregunta Remus confundido, luego, con ayuda de su varita, convierte una cuchara en un espejo—... ¡Sirius Orión Black! —grita enojado.

—¡También fue James! —grito escondiéndome detrás de Peter.

Sus gritos eran parecidos a los de Charlie enojada, y no quiero averiguar si sus golpes también lo son.

—¡James Potter! —vuelve a gritar mirando a mi amigo. Charlie mira a James y niega con la cabeza, pero bueno, es un Potter.

—¡Charlie también ayudó! —grita protegiéndose con su plato. Charlie se pega la frente con su mano y le hace una seña obscena a James.

—¿Charlie? —pregunta Remus confundido— ¿Pero cómo es...?

Se detuvo al oír unas risas, un grupo de chicas pasan por la mesa de Gryffindor, riendo y mirando a Remus. Charlie se levanta y las apunta con su varita, haciéndolas callar al instante, pero Remus le da un pequeño manotazo en la mano, haciéndole soltar la varita.

Charlie dirige la mirada a Remus mientras se soba la mano, pero Remus ya no se encuentra ahí.

—¡Remus, espera! —grita parándose y llenado tras de él, aunque él ya estaba saliendo del Gran Comedor— ¡Rems!

James se levanta y deja el plato en la mesa. Viendo su intensión, agarro un puño de salchichas y me levanto para correr detrás de los gemelos.

—¿Por qué me miras así? —pregunto viendo a James.

—¿Salchichas? ¿En serio?

—¡Tengo hambre! —digo y recibo una negación por parte de James.

Los merodeadores.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora